Caracas, 2 oct (RHC) Organizaciones políticas y sociales del mundo expresan su repudio antes las acciones represivas desatadas por el gobierno español contra el pueblo de Cataluña ante comicios independentista.
El Movimiento Electoral del Pueblo (MEP), Patria para Todos (PPT) y Partido Comunista de Venezuela (PCV) se sumaron al repudio expresando: “Nosotros esperamos que en España sean los españoles quienes sepan solucionar sus problemas, en el marco de la ley. Sin embargo, no podemos quedarnos callados y dejar de ver las terribles acciones violentas que ocurrieron en Cataluña, cuando fueron agredidas más de 800 personas por la Policía”, dijo el presidente del MEP, Gilberto Giménez Prieto.
Esa agrupación exigió a la comunidad internacional que condene la utilización de la violencia como una forma de hacer política.
Por su parte el PCV manifestó su solidaridad con el pueblo catalán y deploró la fuerte represión por parte de las fuerzas militares y efectivos policiales contra los ciudadanos que el domingo salieron a votar a favor de la independencia.
Por su parte, Pedro Eusse, vocero del PCV, precisó que en España se agredió la democracia, por parte del Estado español, y a centenares de ciudadanos que reivindican su derecho a expresarse electoralmente.
Mientras que el PPT exhortó a las Naciones Unidas y a la Unión Europea a abrir una investigación contra el Gobierno de Mariano Rajoy, ante la clara violación de los derechos humanos.
La víspera el presidente de la República, Nicolás Maduro, expresó su solidaridad con el pueblo de Cataluña tras las jornadas de represión registradas durante el referéndum de independencia, y señaló que el presidente de España, Mariano Rajoy, debe responderle al mundo.
'Rajoy tiene que responderle al mundo por lo que le ha hecho al pueblo catalán. Toda mi solidaridad con el pueblo de Cataluña. Cataluña tiene el derecho a la democracia, a la libertad, tiene derecho a la tranquilidad', declaró durante la emisión de su programa Los Domingos con Maduro.
Mientras que el gobierno alemán de la canciller federal Angela Merkel no ha comentado los últimos sucesos en Cataluña públicamente, el presidente del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), Martin Schulz, habló de “una escalada preocupante”.
“Madrid y Barcelona tienen que lograr un descenso progresivo de la violencia para buscar el diálogo”, escribió Schulz en su cuenta de Twitter.
El primer ministro del Estado Federado de Turingia, Bodo Ramelow, destacó en su página de Facebook que “cada uno debería tener el derecho de mantener y cultivar su propio idioma, constitución, desarrollo y bandera”.
El político del Partido de la Izquierda (Die Linke) agregó que aboga “por un Europa de las regiones por lo cual deseo un estado federado español”.
El jefe de gobierno de Turingia concluyó su comentario exigiendo un “cese inmediato de la intervención de la Guardia Civil”.
Mientras, el diputado del Partido de la Izquierda, Andrej Hunko, que se encuentra todavía como observador internacional en Barcelona, condenó “la dimensión de la violencia contra ciudadanos catalanes dispuestos a votar”.
El parlamentario dijo además haber sido testigo del uso de balas de goma contra manifestantes.
“Escuelas dañadas, la lucha brutal por las urnas electorales y electores bañados en sangre no corresponden a un Estado moderno de derecho”, concluyó Hunko en una entrevista con la prensa.
Uruguay lamentó hoy la represión policial contra el pueblo catalán en medio del referéndum independentista, que dejó un saldo de más de 800 personas lesionadas por la inusitada violencia.
Un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores expresó que el gobierno uruguayo “lamenta los hechos acaecidos en el día de ayer en la Comunidad Autónoma de Cataluña”, en una consulta que fuera declarada nula por el Tribunal Constitucional de España.
La nota expresó sus deseos para que “se encuentre una solución a esta situación que enfrenta al gobierno de España con las autoridades de la Comunidad Autónoma de Cataluña”.
A su vez, hizo “un llamado al diálogo” que permita restablecer la normalidad institucional del país.
La víspera los cuerpos de seguridad de la Policía Nacional y la Guardia Civil, enviados por el presidente español, Mariano Rajoy, hacia Cataluña, arremetieron con fuerza contra las personas que se disponían a votar en el referéndum y confiscaron por la fuerza urnas y papeletas.
Los datos oficiales reportados indicaron que en la consulta participaron dos millones 262 mil 424 catalanes y como resultado de la violencia resultaron heridas más de 800 personas.
De los más de 5,3 millones de electores con derecho a votar, dos millones 20 mil 144 votos lo hicieron por el Sí a la secesión (90 por ciento), 176 mil 565 apostaron por el No (7,87 por ciento), 45 mil 586 votaron en blanco y dos mil 129 boletas fueron anuladas.
El presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, propuso un diálogo bajo mediación internacional para zanjar la crisis territorial en esa región, la cual se pronunció por la secesión de España en un referendo unilateral.
Puigdemont pidió restituir la normalidad institucional alterada y exigió retirar las fuerzas de seguridad enviadas por el ejecutivo central a esa comunidad autónoma.
También denunció los graves actos de violencia protagonizados el domingo por los comandos del miedo, en alusión a los miles de efectivos de la Policía Nacional y la Guardia Civil que causaron casi 900 heridos en ese territorio para impedir que se votara.
Ante la creciente condena mundial a la represión perpetrada por tropas antidisturbios, la Comisión Europea exhortó al diálogo a todas las partes implicadas en el conflicto catalán.
