Roma, 5 nov (RHC) Unos cuatrocientos migrantes fueron rescatados en el Mediterráneo y los cadáveres de 26 mujeres que perecieron en el intento de llegar a Italia por esa vía.

Como una tragedia para la humanidad calificó el hecho el prefecto de la sureña ciudad italiana de Salermo, Salvatore Malfi, quien auguró una investigación de la fiscalía para determinar si existen razones para la apertura de un expediente por homicidio.

El funcionario agregó que, aunque con anterioridad llegaron a ese puerto buques con cadáveres de migrantes recuperados en el mar, en esta ocasión será todo más complicado pues resulta evidente que las víctimas no perecieron por accidente.

Mientras guardacostas de Libia rescataron este fin de semana a 151 migrantes irregulares de varias nacionalidades cuyas precarias embarcaciones se encontraban a la deriva en aguas del Mediterráneo.

El coronel Ayub Al Kasem, portavoz de la Armada libia, señaló que los dos botes de goma con sus motores averiados que transportaban a los migrantes fueron hallados a unas 22 millas de la costa.

Esas personas “fueron trasladadas a una base naval cercana donde recibieron los primeros auxilios. Después se les llevó al centro de acogida de migrantes” sostuvo Al Kassem.

Entre los rescatadas, agregó, se encontraban una mujer proveniente de Níger, siete niños de Senegal, veinticinco niños de Bangladesh y tres niños de Egipto.

La costa norte de Libia, sumida en una guerra civil y carente de un poder centralizado, es una de las regiones preferidas por traficantes humanos para lucrar con las necesidades de personas que, huyendo de conflictos locales o de la pobreza en sus naciones de origen, intentan llegar a Europa atravesando el mar Mediterráneo.

Acorde con la Organización Internacional de las Migraciones, más de 149 mil 800 migrantes irregulares han logrado cruzar a Europa en 2017, en tanto se calcula que otros dos mil 826 han han muerto en la travesía.