Caracas, 28 nov (RHC) El primer mandatario Nicolás Maduro ratificó la continuidad del enfrentamiento a la corrupción en PDVSA - Petróleos de Venezuela Sociedad Anómina - para convertir a la empresa en motor del desarrollo del país.
En una reunión en Caracas con trabajadores petroleros, quienes ratificaron su compromiso de lucha contra ese flagelo, aseguró Maduro que junto a la clase obrera ha llegado la hora de una gran limpieza en PDVSA.
El jefe de Estado autorizó al vicepresidente ejecutivo, Tarék El Aisámi, y al de Información, Cultura y Turismo, Jorge Rodríguez, a comunicar al pueblo de los hechos de corrupción que han afectado a la principal industria venezolana.
“Ha llegado la hora de una gran limpieza en Pdvsa junto a la clase trabajadora. Caiga quien caiga”, aseguró el mandatario durante una reunión en Caracas con trabajadores petroleros, quienes ratificaron su compromiso de lucha contra la corrupción.
El mandatario denunció también que los corruptos estaban al servicio de Estados Unidos y planeaban en los tiempos de la crisis política promovida por la oposición provocar un paro petrolero.
Maduro destacó asimismo la labor del fiscal general, Tareck William Saab, en la batalla contra la corrupción y le agradeció por poner el orden e impartir justicia en Venezuela tras su designación por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
Recordó las denuncias recibidas de trabajadores el año pasado lo que lo llevó a ordenar una investigación, como la desatada por ejemplo en la Faja Petrolífera del Orinoco, la cual calificó de un campo sagrado certificado por el Comandante Hugo Chávez.
'Entregué las pruebas la anterior fiscal(Luisa Ortega), ahora prófuga de la justicia, y las utilizó para extorsionar a los involucrados, quienes después se fugaron al exterior', explicó.
De igual modo, informó que del 2 al 4 de diciembre se rememorará los 15 años del llamado paro petrolero, acción de sabotaje que conllevó al país pérdidas de miles de millones de dólares.
Maduro instó, además, a convertir a la principal empresa estatal del país en una potencia en función del desarrollo nacional, para lo cual invitó al alto mando de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana.
Con anterioridad, anunció al país la designación del abogado y politólogo Ysmel Serrano como vicepresidente general de Pdvsa, quien, junto al nuevo presidente de la empresa, Manuel Quevedo, juramentó ante sus trabajadores.
También propuso al embajador en Cuba, Alí Rodríguez, para el cargo de presidente honorario de Petróleos de Venezuela S. A.
En el evento -en el que se encontraban además El Aissami y Asdrúbal Chávez, nuevo presidente de la subsidiaria Citgo Petroleum Corporation- el presidente venezolano recibió una solicitud de la creación del Museo Petrolero y la activación de la Biblioteca de los Petroleros.
