París, 23 feb (RHC) El gobierno de Francia anunció un amplio plan dirigido a luchar contra la radicalización terrorista, el cual incluye 60 medidas en ámbitos como la educación, las comunicaciones y el control de los detenidos islamistas.

Autoridades detallaron ante la prensa local que en el proyecto, calificado como urgente ante la amenaza terrorista, sobresalen la vigilancia de las redes sociales y la lucha contra la divulgación de ideas radicales, para lo cual se impulsan además normativas en la Unión Europea.

Explicaron que se enfocarán en garantizar una atención especializada a los hijos de terroristas, quienes regresan de las zonas en conflicto en el Medio Oriente, con vistas a contribuir a su reinserción social.

Precisaron las fuentes en el país europeo que tanto para esos menores, como para los jóvenes y adultos involucrados en el movimiento islamista, se prevé movilizar a equipos de psicólogos, psiquiatras y sociólogos, en aras de reforzar los programas de desradicalización, que también se implementarán en prisiones.

Por otro lado, el gobierno francés reforzará el control sobre las escuelas privadas no concertadas, establecimientos autónomos en su mayoría laicos, donde existen algunos confesionales de las diversas religiones.

También se divulgó que la justicia de Francia inculpó a un sospechoso de tener nexos con los atentados ocurridos en agosto en las ciudades catalanas de Barcelona y Cambrils, y lo colocó además en prisión provisional.

De acuerdo con fuentes judiciales, citadas por la prensa local, el individuo nacido en 1986 enfrenta el cargo de “asociación de malhechores terrorista criminal”, por lo cual deberá responder ante un tribunal.

El hombre es sospechoso de guardar alguna relación con Driss Oukabir, quien se encuentra encarcelado en España por su presunta pertenencia a la célula terrorista autora de los ataques.

Las autoridades policiales detuvieron al imputado esta semana junto con otras dos personas, que fueron liberadas por no existir ningún elemento incriminatorio.