Caracas, 21 mar (PL) El analista político Vladimir Adrianza afirmó que las agresiones y sanciones del gobierno de Estados Unidos contra Venezuela tienen como objetivo convertirla en un estado fallido.

Aseveró el experto que las autoridades de Washington enfocan su política injerencista hacia países que se niegan a someterse a sus intereses, como la República Popular Democrática de Corea, Siria, Irán, Rusia, China y la nación sudamericana, informó Venezolana de Televisión.

Adrianza criticó la reciente orden ejecutiva firmada por el presidente estadounidense, Donald Trump, en la cual prohíbe a las empresas y ciudadanos de ese país efectuar transacciones o negocios que involucren a la criptomoneda emitida por el Estado de Venezuela, el petro.

El analista sostuvo que ante las posibles afectaciones asociadas al decreto de Trump, el gobierno venezolano debe potenciar la producción, implementar un sistema de distribución adecuado y estabilizar la moneda nacional a través del activo digital, y de esa forma garantizar la soberanía económica.

Respaldada por los recursos energéticos del país, el petro tiene como objetivo romper con el monopolio del dólar en el ámbito comercial internacional y vencer el bloqueo financiero asociado a las sanciones económicas promovidas por Estados Unidos y sus aliados contra Caracas.

Fuentes gubernamentales indicaron que el proceso de preventa del criptoactivo estatal generó ofertas por más de cinco mil millones de dólares desde el comienzo de las operaciones el 20 de febrero último.

La escalada de ataques contra Caracas por Estados Unidos se recrudeció en marzo de 2015, cuando el entonces presidente Barack Obama declaró emergencia nacional por la “amenaza inusual y extraordinaria” que representaba Venezuela para la seguridad y la política exterior norteamericana.

A partir de ese momento, Washington emitió sanciones contra diversos funcionarios del gobierno bolivariano, y en agosto de 2017 atacó el corazón de la economía venezolana al prohibir a los bancos estadounidenses realizar transacciones nuevas con el ejecutivo y con la estatal Petróleos de Venezuela.