Me complace anunciar que tengo la intención de nominar al muy respetado almirante y médico, Ronny Jackson, como nuevo Secretario de Asuntos de Veteranos. Mientras tanto, el honorable Robert Wilkie, del Departamento de Defensa, servirá como secretario interino, escribió el mandatario en Twitter.

De acuerdo con el diario USA Today, Shulkin estuvo durante meses en una lucha de poder con un grupo de personas designadas por Trump entre su personal superior que lo querían fuera del puesto.

Su salida del cargo se une a más de una veintena de altos funcionarios que fueron despedidos o renunciaron desde la llegada del presidente al poder el 20 de enero de 2017, una tendencia que llevó a demócratas y analistas a calificar al actual gobierno de inestable.

La expulsión sugiere que esas fuerzas finalmente convencieron al presidente de que el único miembro del gabinete que provenía de la administración de Barack Obama (2009-2017) era demasiado moderado y no resultaba adecuado para dirigir la agencia, indicó la publicación.

Durante 2017, el jefe de la Casa Blanca mostró su aprecio por el funcionario y llegó a elogiarlo públicamente por algunas victorias legislativas vinculadas a su agencia.

Sin embargo, a inicios de este año una investigación interna del departamento encontró que Shulkin y otros altos funcionarios incurrieron en excesos en un viaje por Europa que, según la pesquisa, fue mayormente turístico y no de trabajo, lo cual a los críticos del depuesto secretario.

Según USA today, el secretario había prometido que el Departamento no sería privatizado bajo su supervisión, sino que proporcionaría a los veteranos más oportunidades para obtener atención del sector privado.

Pese a esas contradicciones, CNN señaló que Shulkin siguió siendo muy popular en el Congreso y retuvo el apoyo de muchas de las principales organizaciones de veteranos de la nación, algunas de las cuales pidieron a Trump mantenerlo en el puesto.