Damasco, 20 abr (RHC) El grupo terrorista Estado Islámico (EI) depuso las armas ante el Ejército sirio en el Campamento de Refugiados Palestinos de Yarmouk y el aledaño distrito de Hayyar Asswad, en el sur de Damasco.
La agrupación extremista comunicó su abdicación y aceptó salir hacia el norte de Siria a menos de 24 horas del inicio de una ofensiva lanzada contra ellos por las fuerzas gubernamentales.
Según la Agencia de Noticias Sana, la mayoría de los grupos terroristas en la zona sureña anunció su rendición, en virtud de un acuerdo con el Ejército que estipula ante todo un alto el fuego.
El texto del convenio estipula la salida de todas las facciones radicales de áreas del sur de Damasco, e incluye el indulto de los elementos extremistas que se entreguen a las fuerzas gubernamentales.
Los radicales del EI o Daesh serán evacuados en zonas del desierto entre las norteñas provincias de Homs y Deir Ezzor, en tanto los radicales del Frente Al-Nusra se marcharán a Idlib.
El acuerdo abarca también los distritos de Bibila y Yalda y Beit Sahem, precisaron las fuentes.
La ofensiva militar de las fuerzas leales a Damasco no terminará hasta que la totalidad de los grupos terroristas radicados en el sur de Damasco se comprometan a abandonar la importante demarcación.
El Ejército de este país árabe abrió un nuevo frente ofensivo en zonas sureñas del país, poco después de expulsar a formaciones takfiríes como el Ejército del Islam de la región de Ghouta Oriental, al este de Damasco.
Igualmente, tropas gubernamentales sirias hallaron en la recién liberada ciudad de Duma una fosa común con los cuerpos de 112 personas, ultimadas por el grupo extremista Jeish al-Islam.
El director general de Médicos Forenses de Siria, Zaher Hajo, indicó que las ejecuciones tuvieron lugar hace casi dos semanas, luego de enfrentamientos entre el Ejército sirio y esa fuerza radical.
De acuerdo con la fuente, los cuerpos de los occisos fueron trasladados a un departamento forense legal para ser identificados y luego entregados a sus familiares.
El hallazgo tiene lugar pocos días después de ser evacuados los integrantes de la agrupación extremista de la ciudad de Duma a la de Jarablus, en la norteña provincia de Alepo, en virtud de un acuerdo con el Ejército.
La víspera, fuentes militares sirias dieron cuenta también de que el ejército encontró otra fosa común con los cuerpos de 150 soldados en el poblado de Al-Wawi, 50 kilómetros al sudoeste de la ciudad de Raqqa, en el norte de este país levantino.
Según medios locales, los muertos son militares ejecutados por los terroristas del grupo Estado Islámico o Daesh en 2015.
