Bogotá, 23 abr (RHC) El partido de la FARC y exponentes de otros sectores políticos en Colombia expresaron preocupación por el deterioro de la salud del dirigente Jesús Santrich, quien cumple hoy 12 días de huelga de hambre.
A través de twitter el miembro del Consejo Político Nacional de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) Iván Márquez, expresó su idea de que mejorarían las condiciones de reclusión, y cuestionó al ministro de Justicia, Gil Botero, el aislamiento y la carencia de lazarillo de Santrich, qien además tiene problemas de salud.
También desde los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación, donde hacen vida los excombatientes de la FARC, circulan en las redes sociales numerosos mensajes de solidaridad con Santrich y con los 600 exguerrilleros que siguen en prisión, pese a una ley de amnistía.
Este lunes el senador del partido Polo Democrático Alternativo, Iván Cepeda, visitó al exnegociador de la paz en la cárcel bogotana de La Picota y advirtió a la prensa que ha perdido cinco kilogramos de peso desde que inició el ayuno.
Cepeda manifestó seria preocupación por el estado de salud de Santrich, luego de informar que presenta un cuadro de hipoglicemia.
El ministro del Interior, Guillermo Rivera, se pronunció sobre el caso y dijo que 'hay que esperar la solicitud formal de extradición, que son 60 días, luego la JEP (Justicia Especial de Paz) tendrá otro tiempo para revisar si esas conductas fueron después de la firma del acuerdo y de ser así pasará a la Corte Suprema'.
El partido de la FARC ha defendido la inocencia de Santrich, a quien la justicia estadounidense acusa de narcotráfico.
Considera la exguerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo que su arresto es un montaje jurídico para deslegitimar al partido y para favorecer a los enemigos de la paz en el actual escenario electoral.
Hoy Santrich volvió a insistir en su inocencia y dijo que no se sometería jamás a la justicia ordinaria local que califica de corrupta y mucho menos a una corte estadounidense.
También desde los Espacios Territoriales de Capacitación y Reincorporación, donde hacen vida los excombatientes de la FARC, circulan en las redes sociales numerosos mensajes de solidaridad con Santrich y con los 600 exguerrilleros que siguen en prisión, pese a una ley de amnistía.
Este lunes el senador del partido Polo Democrático Alternativo, Iván Cepeda, visitó al exnegociador de la paz en la cárcel bogotana de La Picota y advirtió a la prensa que ha perdido cinco kilogramos de peso desde que inició el ayuno.
Cepeda manifestó seria preocupación por el estado de salud de Santrich, luego de informar que presenta un cuadro de hipoglicemia.
El ministro del Interior, Guillermo Rivera, se pronunció sobre el caso y dijo que 'hay que esperar la solicitud formal de extradición, que son 60 días, luego la JEP (Justicia Especial de Paz) tendrá otro tiempo para revisar si esas conductas fueron después de la firma del acuerdo y de ser así pasará a la Corte Suprema'.
El partido de la FARC ha defendido la inocencia de Santrich, a quien la justicia estadounidense acusa de narcotráfico.
Considera la exguerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo que su arresto es un montaje jurídico para deslegitimar al partido y para favorecer a los enemigos de la paz en el actual escenario electoral.
Hoy Santrich volvió a insistir en su inocencia y dijo que no se sometería jamás a la justicia ordinaria local que califica de corrupta y mucho menos a una corte estadounidense.