Buenos Aires, 10 jul (RHC) Una multitud se manifestó en Buenos Aires contra el acuerdo con el FMI y la política económica neoliberal de Mauricio Macri, quien admitió que Argentina está "pasando una tormenta" pero ratificó el rumbo de su gobierno, al celebrar el país el día de su independencia.
"Estamos acá para mediar directamente y decirle 'No' al FMI, no entregar nuestros recursos y poder seguir adelante con un proyecto de patria nacional y popular", declaró a la AFP Norberto Marasco, uno de los manifestantes en el centro de la capital argentina.
Marasco fue uno de decenas de miles de personas que se convocaron bajo la consigna "La Patria no se rinde" y para reclamar "un cambio de rumbo" al gobierno de Macri.
Bajo el título "La independencia no se negocia", un documento leído en el acto denunció la política económica y el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que en junio otorgó a Argentina un salvavidas crediticio de 50.000 millones de dólares.
Argentina tomó el compromiso de un ajuste en las cuentas del Estado y bajar su meta de déficit fiscal a 2,7% en 2018.
"Rompamos las cadenas que nos impone el acuerdo de Mauricio Macri con el FMI que solo nos asegura una miseria planificada", sostiene el texto, que denuncia que "la deuda externa contraída por Macri es ilegal e ilegítima e inconstitucional".
En una fría jornada invernal, Abuelas y Madres de Plaza de Mayo, entre otros organismos de derechos humanos, agrupaciones políticas opositoras y sindicatos combativos se sumaron a la convocatoria, del que participaron músicos y actores populares.
"Vamos a seguir resistiendo para que en el 2019 Macri termine humillado en las urnas", dijo el dirigente del sindicato de camioneros, Pablo Moyano, en referencia a las elecciones presidenciales previstas para el próximo año.
"No vemos que haya voluntad política de cambiar este modelo", agregó, asegurando que existe un "creciente malestar social por las políticas erróneas del gobierno".
La imagen negativa de Macri creció a 59,1% y la positiva se ubica en 35,7%, según una encuesta del Centro de Estudios de Opinión Pública (CEOP) divulgada el domingo, que muestra que el 79,8% de los argentinos consultados tiene "poca o nula" confianza en su equipo económico, en un país con una inflación que no da tregua y una fuerte depreciación de su moneda.
Macri admitió dificultades, pero ratificó el rumbo de su gobierno.
"Estamos pasando una tormenta, fruto de muchas circunstancias, entre ellas, temas de nuestra propia gestión, de los mercados externos y de las políticas tomadas por los gobiernos anteriores", dijo el gobernante.
"Es importante entender que pueden variar los factores, como varía el clima en la navegación, pero el rumbo del barco está claro y sigue siendo el mismo", dijo en un acto en San Miguel de Tucumán (1.200 km al norte), la ciudad donde en 1816 se declaró la independencia de Argentina.