Caracas, 22 ago (RHC) El fiscal general de Venezuela, Tarek William Saab, informó que aumentó a 43 la cifra de implicados en el intento de magnicidio contra el presidente Nicolás Maduro, perpetrado el 4 de agosto en Caracas.

En rueda de prensa desde la sede del Ministerio Público, el titular aseveró que el desarrollo de la investigación proporcionó nuevos datos sobre el alto grado de planificación y conspiración en torno al atentado contra la máxima autoridad de la nación.

Willian Saab precisó que cada uno de los detenidos ha asumido la responsabilidad de sus actos para acogerse a las garantías procesales de la delación, con el aporte de información suficiente para llegar a las conclusiones difundidas.

Señaló que hasta la fecha se llevaron ante los tribunales a 25 ciudadanos vinculados al acto terrorista, como lo definen las autoridades, además de emitirse 18 órdenes de aprehensión contra personas, cuya participación en los eventos del 4 de agosto quedó probada plenamente, aseguró.

El fiscal general recordó que Venezuela solicitó nueve extradiciones de individuos radicados en Estados Unidos, Colombia y Perú, y aún esta en espera de la oportuna colaboración de las autoridades de esos países.

La realización del ataque con drones, a pesar del cambio de escenario, evidencia el alto grado de planificación y conspiración, precisó el titular del Ministerio Público, quien aseguró están identificadas las personas que suministraron información sobre las modificaciones del lugar de la actividad militar.

Mientras los medios de prensa del extranjero orquestan campaña contra medidas económicas tomadas en Venezuela con calificativos que han caracterizado a los planes del Fondo Monetario Internacional (FMI), como la palabra 'paquetazo'.

La nueva campaña mediática internacional descalifica totalmente las medidas económicas impulsadas por el presidente de la República, Nicolás Maduro, que iniciaron el 20 de agosto con la reconversión monetaria.

“El paquetazo”, “el paquetazo rojo” y “el paquetazo económico” son los términos empleados por los periódicos ABC de España, El Comercio de Perú, el diario República del país inca y el portal colombiano NTN24 en sus titulares para descalificar el plan de recuperación económica, equiparándolo con una directriz neoliberal, cuando realmente buscan proteger al pueblo venezolano.

El término “paquetazo”, que también ha sido pregonado por dirigentes de la derecha venezolana, busca hacer una analogía con las medidas neoliberales que aplicó el expresidente Carlos Andrés Pérez (CAP) en febrero de 1989. Nada más alejado de la realidad.

CAP aplicó el “paquetazo” siguiendo las recetas neoliberales del FMI que solo generaron privatización de empresas, incremento de los servicios básicos y liberación de los precios de los productos con excepción de 18 rubros incluidos en la cesta básica, entre otras.

Las medidas económicas de Maduro distan mucho de seguir una receta del FMI y mucho menos perjudicar al pueblo. Todo lo contrario, ya quedó demostrado con el anuncio del aumento salarial a medio Petro, es decir 1.800 bolívares soberanos, acción que se hará efectiva a partir del 1 de septiembre.

Con este aumento salarial de más de 3000%, la intención del Gobierno Nacional es devolver el poder adquisitivo al pueblo, el cual le fue robado por las mafias que promueven la especulación.

El programa de recuperación, crecimiento y prosperidad económica anunciado por Maduro comprende el anclaje del Bolívar soberano y el salario al Petro. Estas dos monedas serán las unidades contables del país, por lo que la gasolina y los hidrocarburos serán fijados a precio internacional, para combatir el contrabando de extracción en la frontera y el combustible será subsidiado a dueños de vehículos automotores a través del Carnet de la Patria y el Sistema Patria.

Las medidas anunciadas por el mandatario nacional también contempla la fijación del valor del criptoactivo en 3.600 Bs S; mientras que el Estado asumirá el diferencial de la nómina salarial de la pequeña y mediana industria y el sector privado del país por los próximos 90 días, esto para que no haya impacto sobre la inflación ya dolarizada.

Asimismo, abarca el establecimiento de un sistema de equilibrio de precios de los productos básicos del Plan 50 en Petros, con su correspondiente equivalencia en Bolívares Soberanos.

El sistema cambiario venezolano tendrá como centro de operaciones el Sistema de Divisas de Tipo de Cambio Complementario (Dicom) y tendrá una sola tasa de cambio fluctuante anclada al Petro.

El Dicom dinamizará sus actividades elevándolas a tres subastas por semana, con proyecciones a realizar cinco en ese lapso, lo que equivale a una por día.

Las medidas económicas implementadas por Maduro son hechas en Venezuela y vienen a acompañar los subsidios, las Misiones y las Grandes Misiones que desde hace 17 años impulsa la Revolución Bolivariana.