Washington, 28 ago (RHC) El secretario estadounidense de Defensa, James Mattis, justificó la presencia de tropas norteamericanas en Afganistán con el pretexto de evitar amenazas hacia su país.
Ante la prensa presente en la sede del Pentágono, el funcionario recordó los atentados en la ciudad de Nueva York y el del 11 de septiembre de 2001, sin embargo, reiteró que la permanencia de dichos uniformados en la nación asiática, cuya cantidad ronda los 14 mil, no será duradera.
Por otra parte, el jefe castrense destacó la importancia de que en los últimos meses se hayan producido dos alto al fuego entre el Gobierno afgano y los talibanes.
En ese sentido, Mattis también se mostró optimista de las posibilidades de alcanzar una solución política a la guerra que comenzó hace 17 años.
De acuerdo con datos oficiales, desde 2001 unos dos mil 400 norteamericanos perecieron en el referido conflicto bélico.
Un año atrás, el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció una nueva estrategia para Afganistán y el sur de Asia, la cual tendría como pilar central un enfoque basado en las condiciones sobre el terreno.
Otra característica fundamental de la iniciativa, según el mandatario, resultaría la integración de todos los instrumentos del poder estadounidense (diplomático, económico y militar) hacia un resultado exitoso.
Algún día, después de un esfuerzo militar efectivo, agregó el 21 de agosto de 2017, tal vez será posible tener un acuerdo político que incluya elementos del Talibán y Afganistán, pero nadie sabe si eso ocurrirá o cuándo.
Trump, quien como candidato presidencial llamó a la retirada de las tropas estadounidenses, manifestó que al enfrentarse a la cuestión de la guerra mencionada su instinto original fue abandonarla.
'Pero, toda mi vida, he oído que las decisiones son muy diferentes cuando te sientas detrás del escritorio en la Oficina Oval', apuntó el gobernante, quien señaló que estudió con detalle el asunto y se celebraron muchas reuniones durante meses.
Afirmó que llegó a tres conclusiones: Estados Unidos debe buscar un resultado honorable y duradero; las consecuencias de una salida rápida son previsibles e inaceptables, pues crearían un vacío que los terroristas aprovecharían; y las amenazas a la seguridad en Afganistán y la región son inmensas.