Beirut, 6 sep (RHC) El Ministerio de Relaciones Exteriores de El Líbano, elogió al presidente paraguayo, Mario Abdo Benítez, quien anuló la transferencia de la embajada del país sudamericano a Jerusalén, capital de Israel.

Abdo Benítez revocó así una orden de su antecesor Horacio Cartes y mantendrá su representación en Tel Aviv, ciudad israelí situada en la costa mediterránea de ese país.

Por otra parte la cancillería libanesa emitió una nota, en la cual exhorta a todos los Estados revertir su decisión de trasladar legaciones diplomáticas a la ocupada Jerusalén.

El ministerio también llamó a imitar el ejemplo de Paraguay en respeto a la legitimidad internacional y las resoluciones adoptadas por el Consejo de Seguridad de la ONU.

Paraguay recibió el apoyo de la Liga Árabe y la Organización para la Cooperación Musulmana (OCM), por el traslado de su embajada nuevamente a Tel Aviv en notas enviadas al gobierno de Mario Abdo Benítez.

El canciller guaraní, Luis Castiglioni informó que recibió esos textos de la entidad árabe formada por 22 países y la otra de la OCM de 57 naciones.

Ambas notas –dijo Castiglioni-, coinciden con la nación paraguaya sobre el respeto al derecho internacional y manifiestan que apoyan el traslado de nuestra sede diplomática a Tel Aviv.

Sostuvo que la voluntad expresada por todos esos países coincide en que las negociaciones y el diálogo serán la única vía para encontrar la paz en el Oriente Medio.

Mencionó la llamada recibida de su homólogo turco, Mevlüt Cavusoglu, anunciando oficialmente la apertura de su embajada en Paraguay.

“Nos llena de satisfacción, Turquía es una potencia política, militar y económica. El hecho que hayan decidido abrir su legación aquí, significa mucho para nosotros”, afirmó Castiglioni.

También destaco la visita que le hizo el embajador de Gran Bretaña, Matthew James Hedges, con quien habló temas bilaterales y de cooperación entre ambos países.

El diplomático británico expreso sus congratulaciones por la decisión de Paraguay, de restablecer su conducta apegada al derecho internacional, por apostar al proceso de diálogo permanente y a las conversaciones para encontrar soluciones a los grandes problemas.