Washington, 9 nov (RHC) El Gobierno de Estados Unidos anunció una nueva medida contra los migrantes que deseen ingresar al país norteamericano, arremetiendo contra la posibilidad de pedir asilo.
Mediante un comunicado conjunto emitido por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés) y la Fiscalía señalaron que los migrantes que no lleguen al territorio estadounidense por un puerto de entrada autorizado no van a poder pedir asilo, precisa Telesur.
Esta medida surge en el marco de la caravana de migrantes que actualmente está en México y tiene como destino EE.UU..
Las autoridades estadounidenses alegaron que el sistema de asilo está sobrecargado con demasiadas peticiones injustificadas de extranjeros lo que representa “una tremenda carga para nuestros recursos”.
"Aquellos extranjeros que infringen una suspensión o limitación presidencial para ingresar a Estados Unidos a través de la frontera sur con México (…) serán inelegiblse para el asilo", citó el comunicado..
Ahora se espera que la norma sea firmada por el presidente Donald Trump, que será aprobada si considera que “está en consonancia con el interés nacional”.
La medida contempla que los migrantes solo puedan solicitar asilo en los puntos de accesos autorizados en la frontera, esta medida contrasta con la situación actual en la que los indocumentados tienen hasta un años para tramitar su solicitud de refugio.
"Con este plan los migrantes ilegales no podrán obtener nunca más un pase gratis a nuestro país realizando reclamos sin mérito al pedir asilo. En cambio, los migrantes que buscan asilo tendrán que presentarse legalmente en los puertos de acceso" aseguró el gobernante durante una rueda de prensa que tuvo lugar en la Casa Blancaen el marco de las elecciones de medio mandato en EE.UU. realizadas el pasado martes.
Trump sostuvo que su "administración está finalizando un plan para acabar con el abuso desenfrenado de nuestro sistema de asilo" agregó durante la rueda de prensa.
Hasta los momentos el presidente de EE.UU. ha dado órdenes de movilizar a la frontera con México un contingente de 5.600 militares para contener la caravana de migrantes que el mandatario ha considerado como una invasión a su país.
(Telesur)