Seúl, 22 ene (RHC) Corea del Sur declaró el fin de una disputa con Japón por el uso de un radar en el mar del Este, un día después de que Tokio anunciara el cese de las consultas bilaterales.
De acuerdo con una declaración publicada en el sitio web del Ministerio de Defensa, Seúl culpa a los japoneses por haber intensificado la querella al recurrir a una campaña mediática pese a las intenciones de los surcoreanos de dialogar para tratar los malentendidos.
El pasado 20 de diciembre Japón denunció que un destructor surcoreano dirigió un radar de control contra uno de sus aviones de patrulla marítima.
Corea del Sur justificó conque el buque de guerra no apuntó al avión y que estaba centrado en una misión humanitaria para rescatar a un barco norcoreano en peligro en las aguas internacionales del mar del Este.
Con anterioridad, el secretario norteamericano de Estado, Mike Pompeo, dialogó por teléfono con el ministro japonés de Relaciones Exteriores, Taro Kono, sobre la República Popular Democrática de Corea (RPDC).
De la misma manera lo hizo con la titular de la diplomacia de Corea del Sur, Kang Kyung Wha, divulgó el Departamento de Estado en doscomunicados.
Las dos conversaciones, precisó la fuente, ocurrieron la víspera, 48 horas después de sendas reuniones del mandatario estadounidense, Donald Trump, y Pompeo con el vicepresidente del Partido de los Trabajadores de la RPDC, Kim Yong Chol.
Después del encuentro con el jefe de Estado, de hora y media de duración, la Casa Blanca anunció que Trump y Kim Jong Un, el líder de Corea del Norte, volverán a reunirse a finales de febrero próximo. Washington comunicó entonces que dará conocer en una fecha posterior la sede de la nueva cumbre entre los dos mandatarios, luego de la histórica cita que celebraron el 12 de junio de 2018 en Singapur.
Como parte de un comunicado previo, la secretaria de prensa de la presidencia norteamericana, Sarah Sanders, anotó que Trump y Kim Yong Chol dialogaron sobre las relaciones entre sus países y el avance hacia la desnuclearización total y completamente verificada de la RPDC.
Ese último tema ocupó principalmente los diálogos de Pompeo con sus interlocutores de Japón y Corea del Sur, así como los compromisos mutuos al respecto, expuso la mencionada entidad federal.
Trump hizo público el pasado 2 de enero que recibió una carta de Kim Jong Un, con quien está dispuesto a celebrar otra cita.
A juicio del jefe de la Casa Blanca, ambas partes han establecido una relación muy buena, y comentó en una reunión con el gabinete que no existe apuro para ese momento.
Un día antes, Trump subrayó que esperaba una nueva reunión con Kim Jong Un, quien, agregó, se da cuenta muy bien de que su país posee un gran potencial económico.
Tal afirmación apareció en la cuenta personal de Trump en la red social Twitter tras citar a la cadena de televisión pública PBS.
“Kim dice que Corea del Norte no fabricará ni probará armas nucleares, ni se las entregará a otros, y está listo para reunirse con el presidente Trump en cualquier momento”, divulgó el medio.
El líder norcoreano aseveró estar listo para otro diálogo con Trump y reafirmó su meta de desnuclearizar al país.
Además, hizo una contundente advertencia a Washington de que los incumplimientos de palabras comprometidas y el sostenimiento de las sanciones contra su nación conllevarían a la disyuntiva de fortalecer, aún más, la defensa de la soberanía e intereses locales.
Recordó que durante 2018 la RPDC dio pasos concretos hacia la desnuclearización y Estados Unidos hizo caso omiso a esas acciones de buena voluntad al no ofrecer las debidas y esperadas garantías de paz.
En casi 70 años, el primer encuentro entre gobernantes de la RPDC y Estados Unidos concluyó con el consenso de trabajar por normalizar sus relaciones y desnuclearizar la península coreana, algo en lo cual Estados Unidos insiste constantemente.