Damasco, 9 feb (RHC) Líderes religiosos de Siria denunciaron las políticas injerencistas de Estados Unidos y Turquía y ratificaron el apoyo al Ejército en defensa de la soberanía nacional contra el terrorismo.
Reunidos en el barrio Tarik al Bab, de la ciudad de Alepo, exigieron además dirigentes musulmanes, cristianos, jeques y dignatarios de las tribus árabe-sirias, la retirada de tropas estadounidenses y turcas en la región norte de esa nación del Levante.-
También expresaron la confianza de que las Fuerzas Armadas liberarán al país, y ratificaron el apego a la unidad e integridad de siria contra el terrorismo y sus patrocinadores.
Mientras un equipo especializado de la república de Armenia comenzó sus labores de asistencia y colaboración en la ciudad siria de Alepo, 350 kilómetros al norte de Damasco.
Según las fuentes, el equipo lo integran 83 miembros, entre ellos desminadores, médicos y personal de seguridad y trabajan en estrecha cooperación con personal especializado de Rusia y Siria.
Alepo sufrió graves destrucciones durante la guerra impuesta por espacio de casi ocho años, sobre todo su casco histórico declarado Patrimonio de la Humanidad en 1986 y actualmente en fase de rehabilitación.
La población de origen armenio permaneció mayoritariamente en la urbe y enfrentó a los grupos terroristas, en particular en los barrios de Al Midan y Al Suleimaniyeh, además de colaborar activamente en la reconstrucción de la ciudad de más de millón y medio de habitantes.
Siria y Armenia mantienen relaciones desde 1982 y según estimados, cerca de un cuarto millón de pobladores de ese país viven sobre todo en Alepo, Damasco y Qamishli.
