Ciudad México, 22 abr (RHC) El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, admitió que en el caso de la corrupción de esa nación pasó del lugar 35 entre los países más corruptos del mundo al 136.
         
Desde el estado de Veracruz, López Obrador afirmó que ese retroceso se dio en los dos mandatos de Vicente Fox y Felipe Calderón, del Partido Acción Nacional, y el de Enrique Peña Nieto, del Revolucionario Institucional.
         
Durante una conferencia de prensa, el mandatario informó que las reuniones de seguridad matutinas se realizarán también desde los estados de la República y no solamente desde la capital como hasta ahora.
         
Afirmó que su visita este fin de semana a Veracruz estaba programada pero coincidió con la masacre en la localidad de Minatitlán, donde fueron asesinadas 13 personas, incluido un bebé.

Según el presidente mexicano, se había escogido Veracruz para hacer un análisis de lo que sucede en ese territorio y apoyar a las autoridades a fin de garantizar la paz y la tranquilidad, pues ese territorio enfrenta una situación lamentable de conflicto, crisis y corrupción.  

Con anterioridad, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, atacó a fondo la violencia social en Veracruz, en la conmemoración del 105 aniversario de la resistencia contra la ocupación estadounidense de ese puerto en  1914.

El mandatario hizo un largo relato histórico de la heroica resistencia de los veracruzanos, en especial de la Escuela Naval Militar, a una ocupación militar estadounidense hace más de un siglo, que le valió a ese estado el título de Veracruz Heroica.

Dijo que las condiciones han cambiado y espera que hechos como aquel jamás vuelvan a producirse. En cambio, señaló, hay ahora otra violencia que es necesario enfrentar y derrotar, la cual es resultados del 'fruto podrido que se heredó de la aplicación de una política económica antipopular y entreguista donde lo único que importaba era saquear al país'.

Ante los altos mandos de las fuerzas armadas aludió a las recientes ejecuciones en esta entidad estatal y dijo que 'duele mucho enterarse y tener noticias como estos asesinatos viles y cobardes de Minatitlán', en alusión a las 13 ejecuciones registradas el viernes pasado.

De nuevo atribuyó los sucesos a 'que tenemos que enfrentar esa mala herencia, ese fruto podrido, ese cochinero que nos dejaron'. Y de inmediato ofreció que “vamos a limpiar al país de corrupción, de impunidad y va haber justicia. Me canso ganso'.

Aprovechó el acto para explicar la necesidad de reorientar las funciones de las Fuerzas Armadas para dedicarlas a fortalecer las tareas de seguridad pública mediante la formación de la Guardia Nacional.

Eso, dijo, 'lo he venido constatando y fue un acierto porque el principal problema de México es la corrupción, de ahí se derivan todos sus problemas, es la causa principal de la desigualdad económica, la desigualdad social, la inseguridad, la violencia, de todos los males de este país'.

Destacó la importancia de las reformas constitucionales que permitirán la creación de la Guardia Nacional mediante la cual se podrán incorporar 220 mil elementos del ejército y 60 mil de la Marina a las tareas de seguridad pública.

'Nos importa la defensa de la soberanía nacional, nos importa la seguridad nacional, la seguridad interior pero lo que más nos urge es garantizar la seguridad pública del país'.

En este sentido subrayó la importancia de que las reformas constitucionales hayan sido aprobada por unanimidad. Explicó que en paralelo, han comenzado a fluir los recursos para apoyar a los jóvenes que habían sido abandonados.

Tras insistir que la mayor parte de las muertes son jóvenes y las cárceles están llenas de ellos, destacó que se invertirán 140 mil millones de pesos (siete mil millones de dólares) en apoyar la incorporación al trabajo y la escuelas de este sector, porque La Paz y la justicia, ratificó, 'son frutos de la justicia'.