Bruselas, 26 abr (RHC) Una masiva protesta protagonizaron trabajadores de Bélgica para demandar justicia social para la clase obrera del país y de Europa, de cara a las elecciones al Parlamento Europeo.

“Es hora de poner a los trabajadores en el primer lugar”, “Por una mejor Europa para las personas”, rezaban algunas pancartas exhibidas en la movilización convocada por la Confederación Europea de Sindicatos (CES).

Los protestantes marcharon por la democracia y la justicia social, empleos de calidad, así como salarios y pensiones más altos, desde la plaza de Luxemburgo hacia la avenida de Auderghem, cerca de los edificios del Consejo y de la Comisión Europea.

También demandaron una transición socialmente responsable hacia una economía digital y encaminada a reducir las emisiones de carbono.

Nos manifestamos para demostrar que el nacionalismo, los partidos de extrema derecha y antieuropeos, no ofrecen solución a los problemas que enfrentamos hoy, indicaron en la convocatoria del evento.

Alrededor de 90 organizaciones sindicales de 39 países europeos están afiliadas a la CES (1973), que representa a 45 millones de trabajadores.

Debido a la sensación de incertidumbre, el 50 por ciento de los ciudadanos piensa que las cosas no van en buena dirección en la Unión Europea ni en su país, reveló ayer una encuesta realizada por el Parlamento Europeo.

Sus preocupaciones para los comicios del 26 de mayo son la lucha contra el desempleo juvenil, la economía y el crecimiento, la inmigración, la promoción de los derechos humanos y la democracia, así como el combate contra el terrorismo.