Tegucigalpa, 8 may (RHC) El Fondo Monetario Internacional (FMI) sufrió una gran derrota en Honduras por las movilizaciones constantes y la lucha social llevada a cabo, según divulgó el opositor Partido Libertad y Refundación (Libre).
En un comunicado, esta fuerza política señala que el gobierno del presidente Juan Orlando Hernández fracasó al tratar de privatizar los servicios de salud y educación tal como imponían el FMI y el Banco Mundial.
Libre recalca que el pueblo hondureño, a través de sus vanguardias políticas y sociales, hizo retroceder a la administración de Hernández.
Enfatizó que por los designios de esos organismos financieros estaban en la mira la estabilidad laboral de los trabajadores de la salud y educación y la derogación de los estatutos del docente y del médico.
No obstante, en esa retirada, el mandatario arreció la represión y persecución contra los dirigentes gremiales y populares de las jornadas de protesta social del 30 de abril pasado, menciona el partido.
Libre se suma al llamado de las fuerzas políticas y sociales de todo el país a formar un frente común en defensa de las libertades democráticas y garantías constitucionales, hoy amenazadas por el gobierno, enfatiza el comunicado.
En ese sentido exige el cese de la represión contra el pueblo y la libertad para los presos políticos, el fin de la persecución y hostigamiento contra los dirigentes gremiales y populares de las jornadas de protesta social.
También, la derogación de la Ley de Reestructuración y Transformación Presupuestaria de la Secretaría de Estado en el Despacho de Educación y la Ley de Reestructuración y Transformación Presupuestaria de la Secretaría de Estado en el Despacho de Salud.
Asimismo, la disolución de las comisiones interventoras de Salud y Educación, la destitución inmediata de los ministros de ambos sectores por su notoria incapacidad en el desempeño de sus cargos.
El pasado 30 de abril, luego de varios días de movilizaciones, el Congreso Nacional eliminó los polémicos decretos que reestructurarían y transformarían los sistemas de salud y educación.
Dichos decretos generaron una ola de protestas en el país porque, al decir de los críticos, llevarían a la privatización de los servicios públicos que aún brindan esos sectores.
'Sí se pudo', corearon en la sala del órgano legislativo los diputados opositores al referirse al resultado de la movilización pacífica del pueblo contra ambas leyes.