Santiago de Chile, 23 jun (RHC) Los docentes chilenos mantienen su huelga iniciada hace varias semanas y se niegan a dialogar con la ministra de Educación de Chile, Marcela Cubillos, quien podría enfrentar una acusación constitucional promovida por varios partidos de oposición.
La bancada de diputados del Partido Socialista anunció la preparación de esa acusación, que implicaría un proceso jurídico-político ante el Congreso Nacional, por su responsabilidad en los problemas que afectan la educación pública en el país.
Los diputados de esa bancada consideran que la ministra Cubillos no ha cumplido sus deberes en la implementación de políticas públicas adecuadas y una correcta ejecución presupuestaria dentro del organismo que encabeza.
Aunque Cubillos aparece en algunas encuestas entre los ministros mejor valorados del gabinete de Sebastián Piñera, ha sido criticada de manera creciente en las últimas semanas por su negativa a participar personalmente en las negociaciones con el Colegio de Profesores que mantiene un paro nacional de más de tres semanas.
Por su parte la bancada de diputados del Partido Comunista e Independientes (PC-I) apoyó la propuesta de los socialistas.
En un breve comunicado expresaron que ello está motivado por la negativa de la ministra a buscar solución a demandas de profesores y de educadoras de preescolar, y la falta de diligencia en la implementación de la Nueva Educación Pública, un proceso que está aprobado por ley.
Asimismo señaló que están “conversando con las distintas bancadas de oposición para propiciar una acción en conjunto”.
Según trascendidos el Partido Radical (PR) y el Partido por la Democracia (PPD) ya dieron su respaldo a la acusación, aunque faltaría una reunión con la voluble Democracia Cristiana (DC), para discutir el tema.
De prosperar la acusación, daría lugar a una confrontación más entre la oposición y el gobierno, pues La Moneda ha manifestado su respaldo a las posiciones de la titular de Educación.
Mientras los miembros de tres sindicatos de la gigantesca mina de cobre de Chuquicamata, en el norte de Chile, decidieron continuar en huelga al menos por una semana más.
Los mineros cumplen este domingo 10 días de paro luego que decidieran asumir la paralización de labores al no llegar a acuerdos con la Corporación del Cobre (Codelco) la empresa estatal propietaria de Chuquicamata, considerada la mina a cielo abierto más grande del planeta.
Según la administración, su última propuesta, presentada el viernes y rechazada por mayoría en asambleas, incluía bonos mayores incentivos monetarios y mejoras en el plan de jubilaciones de los mineros como una indemnización especial y más beneficios de salud al dejar la empresa.
Sin embargo, más que beneficios salariales, los mineros insisten en que sus demandas van hacia mejoras en las condiciones de trabajo y salud y han criticado que la empresa quiere lanzar sobre los hombros de los trabajadores sus errores de cálculo en los proyectos que se han llevado a cabo en los últimos años en la entidad.
Recientemente, la minera concluyó una costosísima inversión para continuar los trabajos en la mina en condiciones subterráneas, lo que prolongaría la vida útil del enclave por varias decenas de años más.
Según datos oficiales, Codelco aporta el nueve por ciento de la oferta mundial de cobre, con una producción anual de alrededor de un millón 200 mil toneladas del mineral, y dentro de ello, Chuquicamata extrae la cuarta parte, de ahí la importancia de esta huelga por las repercusiones que puede tener para la economía.