Lima, 8 oct (RHC) Organizaciones, movimientos sociales y partidos políticos expresan su solidaridad con el pueblo ecuatoriano y condenan la represión desatada por el ejército que ya reporta tres muertos y más de 400 detenidos.
El Movimiento Nuevo Perú (NP) contradijo el apoyo oficial local al gobierno de Ecuador, manifestó su solidaridad con el pueblo de ese país y condenó la represión desatada por la administración de Lenín Moreno.
“Manifestamos nuestra solidaridad con la justa movilización del pueblo ecuatoriano y condenamos la violencia desmedida y sistemática de la policía y las fuerzas armadas”, manifestó la organización que lidera la excandidata presidencial Verónika Mendoza.
Para la organización progresista, en lugar de respaldar a Moreno, como hizo el presidente peruano, Martín Vizcarra, el gobierno debe pronunciarse frente a la violencia desatada contra la protesta social.
“La lucha del pueblo ecuatoriano y sus organizaciones es la lucha de nuestra América por el buen vivir, la dignidad y la esperanza. Cuenten con nosotros para que su voz resuene más fuerte, la imposición neoliberal no pasará”, agrega el pronunciamiento.
La Defensoría del Pueblo de Ecuador instó al presidente de la república, Lenín Moreno, a derogar el estado de excepción decretado a nivel nacional, ante las jornadas de protestas contra recientes medidas económicas.
En un informe, divulgado en su cuenta en Twitter, la instancia consideró que la medida, en vigor desde el pasado 3 de octubre, no ha sido efectiva para controlar la espiral de violencia, sino por el contrario, causó un incremento de la misma en varias zonas de esta nación andina y constituye una limitante para posibles acuerdos hacia el retorno a la calma.
El exhorto se deriva de monitoreos y visitas a unidades judiciales, entre otras acciones realizadas por el ente, que también lo impulsaron a pedir al ejecutivo, propiciar condiciones necesarias para un diálogo oportuno, con garantías de participación ciudadana en la toma de decisiones e igualdad de condiciones, en el marco de un efectivo ejercicio de los derechos.
Al respecto, la Defensoría aclaró que la solicitud busca evitar una radicalización de posturas, la cual puede derivar en el aumento de la violencia, así como en muertes y conmoción social.
La instancia también llamó a la fuerza pública y a las organizaciones sociales movilizadas, a promover un ambiente de paz y respeto a los derechos humanos, con el fin de evitar situaciones con consecuencias irreversibles.
Finalmente, la Defensoría enfatizó en la “necesidad de consolidar al país como un Estado constitucional de derechos y justicia social, cuya base democrática por ningún motivo debe ser amenazada ni utilizada con fines políticos, ni intereses particulares de grupos que buscan desestabilizar la institucionalidad del Ecuador”.
El reporte, firmado por el defensor del pueblo, Freddy Carrión, con una jornada de marchas, en lugares como Quito y Guayaquil, previas a la convocatoria a la huelga nacional, pactada para mañana, contra el paquete de reformas que incluye la eliminación del subsidio a la gasolina extra y el diésel, medida que disparó las movilizaciones.