La Habana, 20 nov (RHC) El presidente de Bolivia, Evo Morales, exiliado en México, denunció este 20 de noviembre la violencia golpista en su país que ha dejado unos 27 muertos desde el pasado día 10 cuando fue víctima de un golpe de Estado.
En una rueda de prensa el mandatario indígena aseguró que durante su gestión cuidó de no usar armas letales contra el pueblo, sin embargo, con la instalación de reciente Gobierno de facto han usado balas para reprimir a los movilizados en defensa de la democracia.
"El mundo está viendo cómo es un golpe de Estado de la derecha (...) están matando a mis hermanos y hermanas", dijo en referencia a las muertes que se van acumulando por la acción de las Fuerzas Armadas.
Según la Defensoría del Pueblo, en total se han registrado 30 muertos desde las pasadas elecciones generales del pasado 20 de octubre.
Morales hizo un llamado a la pacificación del país: "Me duele mucho, después que hemos hecho crecer a Bolivia ahora la están destrozando".
Saludó a los movimientos sociales movilizados de forma pacífica contra el golpe de Estado. Negó que tenga participación de algún tipo con las acciones de los bolivianos que protestan contra la afrenta antidemocrática.
El dignatario convocó, además, a la conformación de una Comisión de la Verdad para investigar los resultados de las elecciones y desmentir el informe de la Organización de Estados Americanos (OEA). (Fuente: TeleSur)