Ginebra, 12 dic (RHC) El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, reafirmó que la salud universal para todos es un derecho humano que impulsará el cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
En ocasión del Día Internacional de la Salud Universal, que se celebra cada 12 de diciembre, Guterres exhortó a los líderes del mundo a garantizar que la atención sanitaria para todos sea una realidad en cualquier parte del planeta.
Calificó de inaceptable e injusto que la mitad de la población mundial no tenga acceso a esos servicios esenciales, mientras unas 100 MILLONES de personas se vean arrastradas hacia la pobreza extrema cada año ante los costos de la atención sanitaria.
Desde 2017, cada 12 de diciembre se convierte en punto de convergencia para el creciente movimiento por la salud universal, el cual impulsa a que todas las personas tengan acceso a servicios de salud de calidad, sin enfrentar dificultades financieras.
Por su parte, varios miembros del Consejo de Seguridad de la ONU coincidieron en que urge retomar el diálogo entre la República Popular Democrática del Corea (RDPC) y Estados Unidos, en aras de avanzar en la desnuclearización.
Mientras que Estados Unidos y las potencias occidentales insistieron en arreciar las sanciones conra la RPDC, China y Rusia abogaron por abandonar esa vía e impulsar medidas de fomento de la confianza.
Según destacó el representante permanente de Moscú ante Naciones Unidas, Vassily Nebenzia, las sanciones y medidas coercitivas unilaterales no pueden sustituir a la diplomacia y el diálogo.
¿Cómo se puede avanzar en el camino de la desnuclearización en la Península de Corea si a Pyongyang se le dice que tiene que aceptar todas las condiciones impuestas con la promesa de que tendrán beneficios en el futuro?, cuestionó el embajador ruso.
Las potencias occidentales y Estados Unidos insisten en mantener las sanciones, y culpan siempre a la RPDC de los escasos progresos, pero ellos no impulsan ningún cambio positivo en las relaciones, consideró.
De acuerdo con Nebenzia, los progresos hechos por Pyongyang a inicios de este año, no encontraron una buena acogida en el Consejo de Seguridad, recordó.
Por la vía de las sanciones y las medidas coercitivas unilaterales no se va a conseguir nada, subrayó Nebenzia y llamó a buscar soluciones políticas y diplomáticas, así como potenciar medidas de fomento de la confianza.
En tanto, la representación de China en el Consejo recalcó la importancia de retomar el diálogo entre Pyongyang y Washington.
La RPDC tuvo avances positivos a inicios de año, pero sus aspiraciones y buena voluntad no recibieron suficiente atención y ahora la situación ha cambiado y se produjeron nuevas pruebas con armamentos nucleares, apuntó la delegación asiática.
A juicio de esa representación, es imperativo que el Consejo de Seguridad realice ajustes en lo referido a las sanciones para animar a la RPDC a avanzar en la vía de la desnuclearización.
Si bien las sanciones tienen incidencias negativas en el pueblo norcoreano, aún buena parte del Consejo de Seguridad insiste en mantenerlas, aunque tales acciones no han arrojado resultados favorables en los últimos años.
Pero también abogan por reanudar los diálogos y negociaciones sobre desnuclearización.
En diciembre de 2018, Pyongyang señaló en un comunicado oficial que “la desnuclearización de un solo lado es un espejismo de Estados Unidos, y reafirmó que no eliminará sus armas nucleares por presiones o amenazas de Washington”.
Para la RPDC, la única forma de defender la paz, la estabilidad en la península coreana y la integridad territorial es estar preparados para la guerra, según su propia concepción.