Asunción, 18 dic (RHC) La concertación de partidos de la izquierda paraguaya, el Frente Guasu (FG), divulgó  su más enérgico rechazo a la instalación de entidades de seguridad estadounidenses en el país.

En una declaración divulgada se expresa que la tercera fuerza política de la nación centrosudamericana, señaló que la presencia de esas fuerzas implica un nuevo y grave retroceso en materia de soberanía, y que de ninguna manera ofrecen las garantías de un funcionamiento claro y transparente.

Igualmente, la entidad oposicionista reiteró su denuncia respecto al funcionamiento de la Fiscalía General del Estado, organismo que necesita urgentemente ser saneado.

Recordó el FG que recientemente el presidente Mario Abdo Benítez confirmó con bombos y platillos la instalación de organismos policiales estadounidenses pertenecientes al Buró Federal de Investigaciones (FBI) en el país bajo el argumento de dar seguimiento a casos de lavado de dinero y crimen organizado, entre otros hechos punibles.

“Hasta el momento –mencionó el texto-, el mandatario no ha sido claro ni dio explicaciones sobre el manto legal con el que se pretende legitimar la instalación de fuerzas de seguridad interna de un país extranjero en Paraguay, en un hecho que claramente expone nuestra soberanía nacional”.

Destacó la entidad izquierdista que resulta muy notable que mientras se hacen públicos estos anuncios, la Fiscalía General del Estado continúa sin mostrar ningún avance significativo en investigaciones respecto a los graves hechos de lavado de dinero y otros ilícitos, y que involucran a figuras y personeros del mundo político y empresarial.

Recuerda la coalición progresista que a partir de la iniciativa de su bancada legislativa se conformó una Comisión Bicameral de Investigación en relación al caso del brasileño Dario Messer, uno de los cerebros del esquema de lavado de dinero y evasión de divisas que se inició en la década de los años 80.

Las pesquisas arrojaron –continuó el FG-, un sinnúmero de hechos que no fueron investigados debidamente por el Ministerio Público, y que dejaron en evidencia la complacencia de los mismos con tales hechos.

Es en esta situación que de la mano del jefe de Estado, Abdo Benítez se instala una comisaría de la policía norteamericana en nuestro país para alimentar la imagen y consolidación de un Estado fallido.

El FG señaló que este hecho, “refuerza la idea de que no somos capaces de hacer que nuestras instituciones funcionen y que inevitablemente debemos estar bajo la tutela de un poder extranjero”.

Subrayó que resulta grave además por los antecedentes históricos que existen en relación a la irrupción de organismos de seguridad de Estados Unidos en nuestro país.

“Es bien conocido, que las “cooperaciones” de esta potencia no han estado precisamente abocadas a favorecer los intereses nacionales de nuestro país, y han venido acompañadas de un paquete de otros intereses”, acota el FG.

Señaló que desde los tiempos de la dictadura de Alfredo Stroessner la cooperación en materia de seguridad de los Estados Unidos con Paraguay, tuvo entre sus ejes la instrucción a la policía paraguaya en técnicas de tortura y persecución con fines políticos.

En la actualidad –argumentó-, estas “asistencias” en otros países de la región se utilizan para realizar investigaciones selectivas, “aprietes” extorsivos, y hasta espionaje en función de los intereses geopolíticos de la nación norteña.