Ciudad de México/Madrid, 31 dic (RHC) Los Gobiernos de México y España se pronunciaron sobre la decisión del Gobierno de facto de Bolivia de expulsar a personal diplomático de ambos países, tras un incidente en la residencia de la representante mexicana, donde permanecen nueve funcionarios de la administración del presidente constitucional, Evo Morales.
El Gobierno de México consideró que la medida, instrumentada por la cabecilla del régimen de facto, Jeanine Áñez, responde más a intereses políticos que diplomáticos, mientras España, como medida recíproca, expulso a tres miembros de la representación boliviana en Madrid, indica Telesur.
La Secretaría de Relaciones Exteriores de México emitió un comunicado en el que considera que la decisión de declarar persona no grata a la embajadora de México en Bolivia, María Teresa Mercado, es de “carácter político” e instruye a la funcionaria regresar con “el fin de resguardar su seguridad e integridad”.
En La Paz, la presidenta de la Cámara de Senadores, Eva Copa, consideró que no fue apropiada la decisión tomada desde el Ejecutivo de declarar personas no gratas a la embajadora de México y a miembros del cuerpo diplomático de España.
"Lamentable, yo veo con mucha preocupación la decisión que ha tomado la presidenta en torno a dar 72 horas a estas dos embajadas que han ayudado mucho a la pacificación del país (...). Creo que es importante que la señora Áñez tome en cuenta su declaraciones y repensar su posición", indicó Copa.
El diputado federal mexicano Mario Delgado indicó que el régimen golpista de Bolivia expulsó arbitrariamente a nuestra embajadora María Teresa Mercado, quien siempre actuó apegada al derecho internacional.
Resulta condenable esta acción que deja en evidencia una vez más a un gobierno ilegitimo, autoritario y represor, indicó Delgado en su cuenta de Twitter.
(Telesur)