Ramallah, 23 ene (RHC) Mientras en Israel celebran el Foro del Holocausto, los grupos solidarios con las causas de los palestinos piden justicia ante la tragedia que enfrenta ese pueblo en la Franja de Gaza y en la igualmente asediada Cisjordania.
Para asistir a tal encuentro, considerado uno de los mayores de tipo político en la historia de Israel, llegaron a Jerusalén los presidentes de Rusia, Vladimir Putin; su homólogo francés, Emmanuel Macron; el príncipe Carlos de Inglaterra; el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, y los gobernantes de Alemania, Italia, Austria y Argentina, entre otras personalidades.
Desde el primer día de la cita, el presidente Reuven Rivlin, su principal anfitrión, invitó a los mandatarios a mantenerse unidos a fin de enfrentar el racismo y el antisemitismo, cuando la humanidad recuerda la liberación de Auschwitz, el mayor centro de exterminio nazi.
El evento central, celebrado en el Museo del Holocausto, fue concebido para recordar y condenar el genocidio sufrido por los judíos europeos, ceremonia a la que asistieron algunos sobrevivientes de la catástrofe.
En tanto transcurría el evento, organizaciones como la Confederación Palestina Latinoamericana y del Caribe pidió a algunos dignatarios que contemplaran la posibilidad de conocer lo que llamaron “la otra cara de la moneda”.
Dicho colectivo, que asegura reunir a 700 mil descendientes de ese grupo étnico dispersos por todo el continente desde 1948, manifestó mediante un comunicado que no desea juzgar las decisiones gubernamentales pero aclaró que tiene el deber de denunciar la realidad que viven los hombres y mujeres en los territorios de la franja de Gaza y Cisjordania.
De la amplia delegación asistente a la reunión, sólo unos pocos gobernantes planearon encontrarse con el presidente Mahmoud Abbas, entre ellos Macron y Putin.