La Paz, 3 feb (RHC) Masiva marcha acompañó al binomio Luis Arce-David Choquehuanca, del Movimiento Al Socialismo (MAS), al inscribirse ante el Tribunal Supremo Electoral con vista a las elecciones generales del 3 de mayo próximo en Bolivia.

Según el calendario electoral, el plazo de admisión de los partidos y alianzas concluye este lunes a medianoche, hora local, cuando las diferentes fuerzas políticas deben haber entregado la documentación exigida por el Tribunal Electoral Plurinacional para su evaluación.

En los próximos seis días será revisada la documentación y posteriormente los candidatos podrán subsanar las observaciones presentadas, pero de inmediato cada uno de los candidatos puede realizar su campaña.

Arce denunció el acoso y la persecución política del gobierno de facto contra los dirigentes, exfuncionarios y los movimientos sociales afines con el Movimiento para impedir su participación en los comicios y aseguró que no se garantiza la democracia ni el Estado derecho en Bolivia.

“Tenemos el pueblo de nuestro lado, somos la única opción política que representa a los más humildes, a los campesinos, a los más empobrecidos (…) Tenemos el respaldo mayoritario de la gente, el pueblo sin ningún interés, solo el de que continúa este proceso”, aseguró el exministro de Economía.

De acuerdo con sondeos recientes y criterios de analistas, el binomio del MAS figura como favorito para imponerse en las urnas, también para alcanzar parte importante, sino la mayoría, de los puestos de senadores, diputados y autoridades supraestatales, cargos también a disputar en las elecciones.

Este lunes Félix Patzi, candidato por el Movimiento Tercer Sistema, se retiró de la contienda electoral derivada del golpe de Estado contra Evo Morales en noviembre pasado.

Con la inscripción de los candidatos del MAS habrían siete aspirantes a la presidencia del país andino, de ellos solo cinco tienen compañero de fórmula para ocupar la Vicerpesidencia según el resultado de las votaciones.

Mientras el expresidente de Bolivia Evo Morales resaltó que a partir del Estado Plurinacional se impulsaron las mejores oportunidades para los más excluidos en su país, entre los que mencionó a indígenas y mujeres.

Así de tajante respondió al semanario uruguayo Brecha en extenso entrevista sobre las enseñanzas de 14 años de poder, en los que consideró importante en lo económico para estar con el pueblo las nacionalizaciones de los recursos naturales y de las empresas estratégicas.

En lo político destacó la refundación de Bolivia como lo más difícil de su gestión, que acabó con “el Estado impostor, la autoridades aparentes, el Estado fallido, las amenazas de hacer desaparecer Bolivia”.

Morales establece una profunda diferencia del proyecto de gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) con la derecha boliviana y con el sistema capitalista, “que consideran la salud y la vivienda como servicios y para nuestro movimiento son derechos”.

Con un matiz crítico apuntó que hay casi tres millones de bolivianos y bolivianas que subieron de la clase humilde o pobre a la clase media y se olvidaron de donde vienen, prefieren no tener compromisos con la sociedad, y ya traen nuevas expectativas.

“No toman en cuenta que todavía hay muchas familias en la situación en la que ellos estaban antes”, sentenció.

Asimismo, calificó de error político histórico el pedido de renuncia de la Central Obrera (COB), que antes le propuso como candidato a la reelección, y lo explicó como motivado por el temor.

Indígena de origen, sigue defendiendo que el ser humano no va a poder vivir sin la madre tierra y hay que respetar sus derechos cuando se trata de aprovechar los recursos naturales con una planificación a corto, mediano y largo plazo.

En torno al golpe de Estado en Bolivia y el papel de la Organización de Estados Americanos (OEA), reconoció como error de su gobierno no percatarse del doble discurso del secretario general, Luis Almagro, que es “un gran agente del imperio estadounidense y opera contra los pueblos”.

Preguntado sobre el plebiscito popular en 2016 para presentarse como candidato presidencial, sostuvo que en esa consulta “ganó la mentira” y su candidatura en 2019 “no ha sido ilegal ni anticonstitucional y se buscó jurisprudencia en América Latina”.

De cara a las elecciones proyectadas para el 3 de mayo, dijo que en lo personal “por ahora no tengo candidatura” y en el caso de que el Mas gane las elecciones y el gobierno golpista de Áñez no reconozca su triunfo, fue contundente.

“Eso reclama un plan B. Yo también pienso que eso pasará. Pero falta mucho todavía, habrá veedores internacionales, y el proceso electoral está en pleno desarrollo”.