Roma, 13 feb (RHC) El papa Francisco recibe hoy al expresidente Lula da Silva en el Vaticano, donde dialogarán sobre medulares temas como el hambre, la desigualdad social y la intolerancia en Brasil y el mundo.

El encuentro entre el pontífice argentino y Lula ocurrirá en horas vespertinas en la Casa Santa Marta, donde Francisco vive y realiza sus citas personales fuera del protocolo habitual de palacio.

Lula, quien se encuentra en Roma, viajó a Italia después que la justicia brasileña aceptara posponer para 19 de febrero un interrogatorio programado para el día 11.

Recientemente, el presidente de Argentina, Alberto Fernández, dijo a Radio Francia Internacional (RFI) que el vicario de Cristo estará encantado de recibir al exlíder del gremio metalúrgico brasileño.

RFI indicó que el tema surgió cuando Fernández y el santo padre hablaron de lawfare (guerra jurídica), término legal utilizado por la operación anticorrupción Lava Jato contra el exmandatario brasileño.

Por segunda vez, Fernández sirvió de puente para una reunión entre emisarios de Lula y Francisco.

La primera fue en agosto de 2018, cuatro meses después de la detención del exjefe de Estado, cuando el argentino ni siquiera era candidato presidencial y trató de organizar una encuentro para dar visibilidad internacional a la prisión política del exsindicalista.

En una entrevista con el portal Brasil de Fato, el reconocido teólogo brasileño Leonardo Boff señaló que uno de los grandes temas del diálogo de este jueves será la desigualdad social.

Afirmó que el padre santo quiere preguntarle a Lula cómo logró reducir la desigualdad en Brasil.

'Es la reunión de dos grandes carismáticos, líderes reconocidos en todo el mundo. Esto será bueno para el papa, que recogerá la experiencia de Lula en el proceso de reducción de la desigualdad', dijo Boff.

Para el exgobernante, prosiguió, será importante reunirse con el papa, 'que tiene las mismas propuestas para acusar y rechazar este sistema mundial que crea tantos pobres, ataca a la naturaleza y es anti-vida. Según el filósofo, Francisco ha acusado a esta desigualdad como consecuencia de una forma de producir y explotar a los trabajadores y a la propia naturaleza.

De acuerdo con el profesor universitario, otro punto fundamental en el intercambio será el rescate de la democracia, especialmente en Brasil, que 'está amenazada por la intolerancia y la brutalidad de las relaciones'.

El pontífice es sensible a la democracia en toda América Latina y resulta tema central de la lucha del fundador del Partido de los Trabajadores, refirió Boff.

'Creo que el papa entendió que su encarcelamiento era algo político, que no debería ser. No sin razón, escribió una carta a Lula, lo cual significa que hubo un reconocimiento de lo que significaba la cárcel', subrayó el teólogo.