Puerto Príncipe, 24 feb (RHC) Policías descontentos y sus partidarios continuaron las protestas en la capital de Haití e instalaron barricadas de neumáticos mientras cortaron el paso a algunas arterias.

En el centro de Puerto Príncipe, la manifestación reunió a decenas de personas que reiteraron las demandas de oficiales de mejores condiciones laborales y derecho a sindicatos.

Las protestas volvieron a paralizar la capital, luego que la víspera una manifestación similar enfrentó a supuestos policías y soldados en el Champs de Mars, para dejar un saldo de dos muertos y decenas de heridos.

Según una nota de la Secretaría del Estado Mayor, los inconformes atacaron la sede del Cuartel General e intentaron incendiarlo, y cuestionó el accionar de los policías cuya función es proteger y servir.

El Gobierno aseveró que tras los sucesos se vio obligado a suspender los carnavales, calificó los actos de situación de guerra y cuestionó por qué lo policías adoptaban un comportamiento extremista en lugar de negociar con el Ejecutivo.

Las protestas se radicalizaron la semana pasada, cuando policías incendiaron varios stands de carnavales y dispararon frente a las instalaciones de la dirección general del cuerpo, además de amenazar con boicotear los festejos populares si no se cumplían sus demandas.

Este lunes se conoció que el sindicato aún no autorizado de la policía pidió a sus colegas mantener la calma para facilitar las negociaciones con las autoridades.

A finales de la semana pasada, el presidente Jovenel Moïse prometió a los oficiales un incremento de unos cinco mil gourdes (poco más de 50 dólares) en sus tarjetas de débito a partir de marzo, además de entrega a las fuerzas carros blindados y otros instrumentos.

Sin embargo, el mandatario omitió el peliagudo tema de la sindicalización, que desde octubre pasado exige una rama de los agentes.

También la Oficina Integrada de Naciones Unidas en Haití condenó la violencia como medio de reivindicación y abogó por la búsqueda de soluciones pacíficas.