Brasilia, 28 feb (RHC) Partidos políticos, movimientos sociales y organizaciones representativas de la sociedad brasileña articulan hoy una dura respuesta al gobernante Jair Bolsonaro por compartir videos en apoyo a una manifestación contra el Congreso Nacional.
Esta semana Bolsonaro respaldó una movilización convocada para el 15 de marzo contra el Parlamento, por supuestamente estar integrado por representantes que ponen obstáculos a su gobierno, indica Prensa Latina.
A través del aplicativo multiplataforma de mensajes instantáneos WhatsApp, el exmilitar envió correos a personas de su confianza en el que llama a un acto contra el Congreso para sumarse a la propuesta del general retirado Augusto Heleno, su consejero y ministro de Seguridad Institucional.
'Brasil es nuestro, no de los políticos de siempre' y se invita a una movilización contra el Congreso para el 15 de marzo, aparece en el video que circuló en el entorno del excapitán del Ejército.
Organizadores de la respuesta contra Bolsonaro indicaron que la estrategia es actuar en dos vertientes. La primera, en las calles, incluye a los sindicatos y a los frentes Pueblo Sin Miedo y Brasil Popular, que reúnen a cientos de entidades.
Representantes de estos frentes y de nueve centrales sindicales se reunieron ayer para definir el calendario de manifestaciones.
La idea es aprovechar el día nacional del paro de los maestros, previsto para el 18 de marzo, para hacer una serie de grandes actos callejeros en todo Brasil.
Centrales sindicales publicaron esta semana una nota en la que señalan la posibilidad de que Bolsonaro haya cometido un delito de responsabilidad y exigen medidas al Congreso y al Supremo Tribunal Supremo Federal respecto a la actitud del mandatario ultraderechista. 'Con este acto, una vez más, el presidente ignora la responsabilidad del cargo que ocupa por el voto y actúa deliberadamente de mala fe, apostando a un golpe contra la democracia, la libertad, la Constitución, la nación y las instituciones (...)', denuncia el escrito.
Antes del 18 de marzo, los movimientos deben salir a las calles en apoyo a las manifestaciones programadas para el Día Mundial de la Mujer (8 de marzo).
La oposición intenta articularse con entidades representativas de la sociedad que, aunque no tienen mucho poder de movilización, pueden dar peso simbólico e institucional a los actos contra el presidente.
El lunes los cinco partidos opositores en el Congreso (de los Trabajadores, Socialista Brasileño, Democrático Trabalhista, Comunista de Brasil y Socialismo y Libertad) se reunirán con representantes de estas entidades en Brasilia.
(Prensa Latina)