Caracas, 1 mar (RHC) El canciller de Venezuela, Jorge Arreaza, responsabilizó al secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, por el periodo de desestabilización gubernamental en Bolivia, como una clara violación de los derechos humanos por las protestas.

Luego de conocerse el informe del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), el cual reveló que el expresidente boliviano Evo Morales ganó los comicios de octubre de 2019 sin fraude alguno, el jefe de la diplomacia venezolana aseguró que la OEA apoyó la instalación de un gobierno de facto en esa nación.

“La OEA se involucró en el proceso electoral de Bolivia para facilitar el golpe de Estado. Sobre Almagro recae la responsabilidad por los muertos, heridos y violaciones a los derechos humanos desatadas tras el golpe. El estudio del MIT es concluyente: ¡No hubo fraude!', enfatizó el canciller en la red social Twitter.

Este sábado, el presidente Nicolás Maduro reafirmó su solidaridad con Morales, tras el ratificarse su victoria electoral.

A través de un mensaje difundido en la plataforma comunicacional, el jefe de Estado venezolano aseguró que el documento del MIT constituye una muestra de que la OEA atenta contra la voluntad de los pueblos libres del continente; “toda nuestra solidaridad con el jefe indio del Sur”, enfatizó.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, llamó también a la continuidad de lo que considera una ofensiva social, política y económica para garantizar la paz y estabilidad a la población.

“¡Llegó marzo! Un mes cargado de profundo sentimiento chavista, que nos impulsa a continuar en ofensiva social, política y económica, garantizando la paz, la estabilidad y la prosperidad para nuestro amado pueblo. ¡Siempre leales al legado eterno del comandante Chávez!, escribió Maduro en la red social Twitter.

En reiteradas oportunidades, el mandatario llamó al diálogo, a la convivencia y al trabajo productivo para la consolidación de la Revolución bolivariana.

Maduro exhortó también a la Asamblea Nacional Constituyente, a su equipo de gobierno y al pueblo a centrar los esfuerzos en las líneas de acción estratégicas que permitan fortalecer el desarrollo socioeconómico del país.

De igual forma, instó a la unión nacional a afianzar una cultura de trabajo, con el fin de superar las dificultades que atraviesa la nación sudamericana, producto de la guerra económica, una de las maniobras injerencistas aupadas por sectores opositores.