Tegucigalpa, 13 may (RHC) El expresidente hondureño Manuel Zelaya, derrocado en 2009 tras un golpe de Estado, dijo que hay similitudes entre esa operación y los intentos de desestabilización en Venezuela.
La incursión marítima con la que mercenarios armados pretendían ingresar a territorio venezolano el 3 de mayo —y que fuera desbaratada por militares venezolanos en La Guaira— tiene puntos de comparación con el golpe de Estado impuesto en Honduras en el año 2009, según comentó el expresidente hondureño Manuel Zelaya.
El exmandatario, derrocado por las fuerzas armadas de su país en la madrugada del 28 de junio de 2009, señaló que, más de una década después de aquel quiebre institucional, "todo indica que los organismos de Inteligencia de EEUU se involucraron directamente".
En la primera edición del libro Decisiones difíciles editado en 2014. "Los correos electrónicos que publicó Wikileaks también confirman que atrás de los militares que rompieron el orden constitucional en Honduras estaba, no solo la oligarquía hondureña, sino también los organismos de Inteligencia de EEUU", añadió el exmandatario.
Zelaya señaló que incluso la exsecretaria del Departamento de Estado estadounidense Hillary Clinton "confirma" la influe
Pero ¿hay comparación con lo sucedido el 3 de mayo en Venezuela? Para Zelaya, el punto de contacto es que detrás de ambas operaciones están "los mismos propósitos" por parte del país norteamericano.
Zelaya explicó que en estos planes, una vez derribado el orden democrático, se instalan "mafias políticas o cárteles políticos" para gobernar los países, algo que "responde a un instinto de pirata" que se cierne sobre América Latina "desde la Doctrina Monroe y la política del Gran Garrote".
La Doctrina Monroe debe su nombre al quinto presidente de EEUU James Monroe (1817-1825), quien en 1823 dijo que cualquier intervención de Europa en cualquiera de los países americanos sería considerada por EEUU como una agresión a su propio territorio. "América para los americanos", fue la frase con la que se ilustró la doctrina.
Lo que a comienzos del siglo XIX podía ser visto como una forma de evitar la recolonización de América por parte de Europa, cambió sustancialmente a partir de la mitad del siglo XX. Bajo esa concepción, EEUU participó en varias operaciones militares en territorio de otros países latinoamericanos que tenían gobiernos no alineados a sus intereses. El golpe de Estado en Guatemala en 1954, la frustrada invasión de Bahía de Cochinos en Cuba en 1961, la intervención militar en República Dominicana en 1965, el apoyo a la Contrarrevolución en Nicaragua desde 1980, la invasión a Panamá en 1989 y el apoyo a las dictaduras sudamericanas en las décadas de 1970 y 1980 son algunos de los ejemplos más crudos.
El presidente derrocado en 2009 afirmó que este tipo de acciones se ven impulsadas por "el poder hegemónico del capitalismo y sus imposiciones, que ya no se pueden sostener con argumentos inteligentes sino a través del autoritarismo, la fuerza y la amenaza de guerra, que es la forma en la que hoy actúa el presidente Trump".
El fundador del Partido Libre hondureño señaló que estas incursiones de EEUU se dan en un contexto en el que "el sistema capitalista está más pujante" pero en el que, al mismo tiempo, "el neoliberalismo está seriamente cuestionado", entre otras cosas, por "el fracaso que ha tenido en el área de la salud y los avances tecnológicos con esto del COVID-19".
Fuente: Sputnik