En un programa difundido por la televisión siria, los tres terroristas de Daesh han confesado haber llevado a cabo “diferentes operaciones” contra los militares y civiles sirios “en coordinación” realizada de antemano entre sus líderes con las fuerzas estadounidenses desplegadas en la estratégica base militar de Al-Tanf, sita en el extremo suroriental de la provincia de Homs (centro).
Los actos terroristas incluían matanzas, ejecuciones, secuestros, actos de sabotaje y destrucción de las propiedades públicas y privadas, según recoge la agencia local de noticias SANA.
Uno de los terroristas recuerda que en una ocasión que iban de la ciudad de Al-Raqa a la ciudad de Deir Ezzor, ambas ubicadas en el norte, fueron “escoltados” por varios vehículos estadounidenses, mientras cuatro helicópteros les daban una cobertura aérea.
Al-Tanf, de acuerdo con los detenidos, era “un refugio seguro” para los terroristas de Daesh, donde podrían recibir asistencia médica y cursos de entrenamiento.
SANA explica que los terroristas que aparecieron frente a las cámaras televisivas pertenecían a un grupúsculo vinculado a Daesh, compuesto por seis personas, que fue desmantelado en una operación de seguridad del Ejército sirio. Otros tres miembros murieron en la emboscada organizada en cooperación con los lugareños en el desierto sirio (este), añade el medio árabe.
Un grupo de terroristas sirios, recién entregado al Ejército, admitió en abril, que entrenaba en las bases de EEUU para atacar las infraestructuras del país, de acuerdo con la información facilitada por la dirección del Centro ruso para la Reconciliación en Siria, señala HispanTV.
Varios informes ratifican que EEUU entrena y apoya a los terroristas de Daesh en Siria y lo hace con mucha frecuencia en la base que ocupa en Siria, Al-Tanf. Daesh, de hecho, es un instrumento necesario para que Washington pueda “saquear las riquezas” del país, de acuerdo con los propios sirios.