Washington, 8 agos (RHC) Los niños afroamericanos y los hispanos se ven afectados de manera desproporcionada por la COVID-19 en Estados Unidos, de acuerdo a un informe, que contradice a lo manifestado por el presidente Donald Trump.
El mandatario aseguró durante la semana que "los niños son casi inmunes" al coronavirus.
Según dos informes de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), hasta el 31 de julio, más de 338.000 niños en Estados Unidos fueron diagnosticados con COVID-19.
Los datos, que contaron con el aporte de la Academia Estadounidense de Pediatría, indicaron que la cifra representa alrededor del 8% de los casi 5 millones de casos reportados hasta ahora en el país.
Y los casos pediátricos parecen estar aumentando paulatinamente a medida que aumentan los contagios en todo el país.
Uno de los informes de los CDC encontró que entre el 21 de marzo y el 25 de julio, "las tasas de hospitalización semanal aumentaron constantemente entre los niños".
Los datos pusieron énfasis en que, en general, los niños negros e hispanos tenían más probabilidades de requerir hospitalización.
Las causas hay que buscarlas en que aproximadamente un tercio de esos niños estaban lo suficientemente enfermos como para ser admitidos en la unidad de cuidados intensivos de un hospital.
Se trata de una cifra igual a la proporción de adultos con COVID-19 que han requerido cuidados intensivos, aunque los niños en general tienen menos probabilidades de verse afectados por el virus de forma tan grave como los adultos.
El dato que más llamó la atención es que el 42% de los 208 niños analizados por los CDC tenían al menos una condición subyacente, generalmente obesidad.
"La obesidad infantil afecta a casi 1 de cada 5 niños de Estados Unidos", escribieron los autores de los CDC. "Y esto prevalece más en los niños negros e hispanos", añadieron.
"Hay algo sobre la obesidad que causa un estado inflamatorio subyacente del que no entendemos mucho", dijo el doctor Josh Denson, experto en medicina pulmonar y cuidados intensivos en el Centro Médico Tulane en Nueva Orleans.
Denson trata a pacientes adultos con COVID-19 gravemente enfermos y recientemente publicó una investigación sobre el vínculo entre el coronavirus y la obesidad en la población afroamericana.
En tanto, los Institutos Nacionales de Salud anunciaron que están lanzando un proyecto llamado PreVAIL Kids que tiene como objetivo identificar qué niños podrían estar en mayor riesgo de sufrir complicaciones por COVID-19. (Fuente: Cubadebate).