Pueblo guatemalteco exige renuncia del presidente. Foto: AP

Ciudad Guatemala, 23 nov (RHC) Masivas protestas en la capital de Guatemala que llegaron a quemar la sede del gobierno, impidieron que se recortara fondos del presupuesto en respuesta a las políticas neoliberales implementadas por el gobierno.

El jueves 19 los congresistas aprobaron el presupuesto remitido por el Gobierno que recortaba la inversión en varios aspectos claves para la vida del país como la atención de la desnutrición y la educación. Tras la intensa reacción de la población, el trámite fue suspendido.

De acuerdo a cifras oficiales, el 60% de los guatemaltecos vive bajo la línea de pobreza y uno de cada dos niños sufre desnutrición crónica. En ese contexto, el presupuesto, que reducía el gasto público en salud y aumentaba la concentración de recursos en otras áreas menos prioritarias, encendió la mecha para el estallido social.

El sábado 21, el intenso malestar de la ciudadanía invadió las calles y un grupo intentó prender fuego el Congreso. La actuación policial dejó detenidos y personas heridas pero el ministro de Gobernación, Gendri Reyes, catalogó de "terroristas" a los manifestantes.

El presidente Alejandro Giammatei anunció que invocará la Carta Democrática de la Organización de Estados Americanos (OEA).

Fuente: Sputnik