Beijing, 5 ene (RHC) El Ministerio de Industria y Tecnología Informática de China divulgó su propósito de acelerar la industrialización de las vacunas contra la COVID-19 y ampliar la capacidad de producción para garantizar el suministro de las mismas.
Así lo afirmó hoy martes Wang Jiangping, viceministro de Industria y Tecnología Informática de China, quien precisó que la capacidad de producción de vacunas del país se ampliará de manera estable, al tiempo que se garantiza su calidad y seguridad.
Los planes de producción se organizarán adecuadamente para maximizar el potencial de fabricación y asegurar el suministro de las vacunas contra la COVID-19, manifestó Wang.
El ministerio ha creado un equipo de trabajo especial para rastrear y coordinar semanalmente la manufactura de estos medicamentos por parte de los principales productores.
Con el fin de garantizar una cadena de suministros estable para la producción de vacunas, el país también ha intensificado los esfuerzos encaminados a avanzar en la producción de las materias primas.
Asimismo, China ha ayudado a coordinar la oferta y la demanda de las empresas situadas en los tramos superior e inferior de la cadena industrial en este sector.
Hasta el momento, 18 empresas chinas han comenzado a desarrollar su capacidad de producción de vacunas contra la COVID-19, y los avances consiguientes en la manufactura de vacunas inactivadas permitirán satisfacer la enorme demanda del país, según el ministerio.
Por su parte, Zhang Jin, gerente del Grupo Nacional Biotec de China, precisó que la compañía implementará un plan para expandir su capacidad de producción y garantizar que este año se elaboren más de 1 000 millones de dosis de vacunas inactivadas contra la COVID-19.
El mecanismo conjunto de prevención y control de COVID-19 del Consejo de Estado de China ordenó la estricta inspección de la calidad, seguridad y transporte sin contratiempos de la cadena de frío de las vacunas, así como la distribución oportuna y precisa de las vacunas, luego de que la primera vacuna desarrollada por el país obtuvo aprobación para su entrada en el mercado y la campaña de vacunación se realizará en toda la nación gradualmente.
China siempre ha prestado gran importancia a la seguridad y efectividad de las vacunas contra la COVID-19. El mecanismo también ha subrayado la importancia de proporcionar apoyo y servicio médicos. Especialmente aplica al tratamiento oportuno y al reporte de reacciones adversas durante el proceso de vacunación.
La Administración Nacional de Productos Médicos también estableció un sistema de información de rastreo para la gestión de las vacunas aprobadas.
China aprobó el uso de emergencia de vacunas contra la COVID-19 en junio, dirigidas a grupos con altos riesgos de contagio. Para finales de noviembre, más de 1,5 millones de dosis de vacunas chinas contra la COVID-19 habían sido distribuidas para uso de emergencia, y 60 000 personas vacunadas han viajado al extranjero a regiones de alto riesgo, sin severas reacciones adversas reportadas.
El 15 de diciembre, China lanzó oficialmente un programa de vacunación para este período de invierno-primavera enfocado en algunos grupos clave, incluyendo a los encargados del manejo de productos importados de la cadena de frío, funcionarios de aduanas, trabajadores médicos y personas que trabajan en transporte público y mercados de productos frescos. Las vacunas contra la COVID-19 se aplicarán gratuitamente a todos los chinos.
El número de dosis de vacunación entre los grupos clave supera los 3 millones. "Los 3 millones de dosis de vacunas, sumados a los anteriores 1,5 millones de dosis, prueban plenamente que las vacunas chinas son seguras", dijo ZengYixin, subjefe de la Comisión Nacional de Salud.
La reacción adversa más común en la inoculación fue dolor en el sitio de la inyección, y menos de 0,1 por ciento de casos reportaron fiebre moderada. Alrededor de dos casos por cada millón presentaron reacciones adversas ligeramente graves como anafilaxia. Todas las reacciones son controlables y han sido tratadas correctamente de manera oportuna.
China otorgó la autorización condicional para la comercialización de la primera vacuna contra la COVID-19 en diciembre. La vacuna inactivada desarrollada por el Grupo Nacional Biotec de China (CNBG) afiliado a Sinopharm mostró 79,34 por ciento de eficacia contra la COVID-19, de acuerdo con los resultados provisionales de la fase 3 de ensayos clínicos.
Utilizando microorganismos patógenos muertos para fortalecer la inmunogenicidad, las vacunas inactivadas tienen las ventajas de un proceso de producción maduro, normas de calidad controlables y un amplio rango de protección, señaló Wang Junzhi, académico de la Academia de Ingeniería de China.
Fuente: Xihua