Moscú, 26 oct (RHC) Rusia toma más distancia de la OTAN y ratifica que no hay nada que las vincule, sobre todo tras el énfasis del bloque militar de que Moscú y Pekín son amenazas.
El canciller ruso, Serguéi Lavrov, tildó de malas las relaciones entre la Federación Rusa y la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), es más, aseguró que no había ningún tipo de nexo entre ambas partes.
“La OTAN no es amiga de Rusia, incluso ellos decidieron no ser nuestros amigos al describir a Rusia y China como una amenaza para la organización”, precisó el titular después de reunirse con su homóloga noruega, Anniken Huitfeldt.
Conforme a Lavrov, su buen amigo Jens Stoltenberg (secretario general del aludido bloque militar), “ahora insiste en que la OTAN debería ser responsable de la seguridad mundial”.
Anteriormente, el canciller ruso había alertado de que Moscú suspendería su misión permanente ante la Alianza Atlántica, a partir del 1 de noviembre, como respuesta a la reducción del número de empleados de la misión permanente de Rusia en el bloque.
Lavrov señaló que Rusia está dispuesta a reanudar el diálogo con la Unión Europea (UE) sobre la base de la igualdad de derechos, pero Bruselas aún no está lista.
En los últimos años, los lazos entre Moscú y la Alianza Atlántica han experimentado un deterioro a niveles nunca vistos desde el fin de la Guerra Fría. Ambas partes se acusan mutuamente de llevar a cabo actos hostiles, mientras que cada una organiza maniobras en respuesta a las realizadas por la otra parte.
Rusia considera una amenaza la presencia militar de la OTAN en países de Europa Oriental cercanos a sus fronteras, y advierte que dará una respuesta contundente a cualquier provocación del Occidente.
El viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Alexander Grushkó, afirmó el viernes que las relaciones diplomáticas normales con la OTAN son imposibles en medio de las “medidas hostiles” adoptadas por este organismo contra Moscú.
Grushkó agregó que el aumento de los movimientos de la OTAN alrededor de las fronteras rusas, incluido el despliegue de armas estratégicas, indica que los aliados del bloque están “avanzando rápidamente hacia prácticas de la Guerra Fría” que “afectan directamente a las relaciones con Rusia”
(HispanTV)
