La defensa de Lula defiende una vez más a la persecución política como la esencia
del caso y de todo el proceso Lava Jato

Brasilia, 28 ene (RHC) Varios medios de prensa brasileños destacan hoy la decisión judicial de cerrar el caso Triplex de Guarujá mediante el que se investigaba al expresidente Luiz Inácio Lula Da Silva por presunta corrupción.

La investigación era parte del expediente Lava Jato, una operación anticorrupción que a la larga demostró tener un trasfondo político, en especial impedir la victoria de Lula en las elecciones de 2018, recuerda la web de Gazeta Do Povo.

Por Triplex de Guarujá, el exmandatario y actual precandidato a la presidencia por el Partido de los Trabajadores (PT) fue condenado a ocho años y 10 meses de cárcel, y enviado al centro penitenciario de Curitiba, en el sureño estado de Paraná, donde cumplió 19 meses de reclusión.

A propósito del cierre de la investigación, la defensa de Lula emitió un comunicado en el que defienden una vez más a la persecución política como la esencia del caso y de todo el proceso Lava Jato, apunta la web de noticias brasil247.com

Los abogados también identificaron al exfiscal Deltan Dallagnol y exjuez Sergio Moro de actuar en consecuencia con ese objetivo.

“El cierre (…) refuerza que sólo sirvió para que algunos miembros de la Justicia practicaran el lawfare contra Lula, es decir, para hacer un uso estratégico y perverso de las leyes para perseguir judicialmente al expresidente por motivos políticos”, afirma la declaración.

Firmado por los abogados Valeska Teixeira y Cristiano Zanin, el documento, insiste en la falta de pruebas en el expediente solo demuestra la inocencia del expresidente.

Recordaron que el Supremo Tribunal Federal reconoció la parcialidad del exjuez Moro en este y otros casos contra Lula, y a la postre debieron ser anulados. El líder del PT fue acusado de favorecer a una empresa constructora con negocios estatales a cambio de la remodelación de un apartamento triplex en Guarujá, estado de São Paulo.

Sin embargo la defensa probó que Lula nunca fue propietario, ni se benefició del inmueble.

El expresidente, gran favorito para las elecciones generales de octubre próximo, ha ganado más de 20 procesos judiciales y demostrado que los mismos tenían como objetivo impedir su participación en los comicios de 2018, proceso para el que fue inhabilitado y tuvo como vencedor al actual mandatario Jair Bolsonaro. (Fuente:PL)