Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores
Quito, 5 oct (RHC) La crisis carcelaria persiste este jueves en Ecuador con nuevos disturbios y detonaciones en la Penitenciaría del Litoral, en la ciudad costera de Guayaquil, luego de los incidentes en Cotopaxi que provocaron la muerte de 16 presos.
El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) informó en Twitter que a raíz de los hechos se activaron los protocolos de seguridad y se activó el Puesto de Mando Unificado en busca de controlar la situación.
Videos en redes sociales muestran personas en los alrededores del centro penitenciario corriendo mientras se escuchan disparos y detonaciones.
El motín de este miércoles tiene lugar luego de que durante dos días consecutivos hubiera sucesos similares en la provincia de Cotopaxi, al sur de esta capital, donde 43 reos resultaron heridos y 16 perdieron la vida.
Entre los fallecidos está Leandro Norero, alias El Patrón, considerado uno de los principales narcotraficantes del país, detenido por lavado de activos.
Ecuador vive una serie de masacres carcelarias desde 2021, con cerca de 400 prisioneros asesinados.
Ante la crisis en el sistema penitenciario el Gobierno inició un proceso de pacificación, pero hasta el momento parece no dar resultados, pues las masacres continúan, según las autoridades por disputas entre bandas delictivas.
El ministro del Interior de Ecuador, Juan Zapata; el director del SNAI, Pablo Ramírez; y el Comandante General de Policía, Fausto Salinas, están citados hoy para comparecer ante la Comisión de Fiscalización y Control Político de la Asamblea Nacional e informar sobre la situación en las prisiones.
Muchos ciudadanos culpan de las masacres al gobierno del presidente Guillermo Lasso por la falta de políticas contra la violencia y la inseguridad en el país.
Desde entonces algunos países siguieron los pasos del gobierno norteamericano, aunque la mayor parte de la comunidad internacional mantiene sus misiones en Tel Aviv y considera la zona oriental de Jerusalén como la capital del futuro palestino. (Fuente:PL)