NASA

Washington, 11 nov (RHC) La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) confirmó este jueves que los restos hallados por un equipo de documentalistas en el fondo del Atlántico son del transbordador espacial Challenger, el cual explotó 73 segundos después de su lanzamiento el 28 de enero de 1986, acabando con la vida de los siete miembros de la tripulación.

Los buzos, quienes buscaban una aeronave de los tiempos de la Segunda Guerra Mundial, encontraron el objeto de gran tamaño frente a las costas de Florida (EE.UU.), cerca del Cabo Cañaveral.

Equipo de History Channel inspecciona el fragmento del Challenger.The History Channel / AP

El fragmento mide alrededor de 4,5 por 4,5 metros, pero sus dimensiones podrían ser mayores, ya que en parte sigue cubierto de arena. En todo caso, se trata de una de las piezas más grandes de Challenger descubiertas hasta el momento, ya que en 1996 fueron encontrados dos fragmentos del ala izquierda.

El gerente de la NASA Michael Ciannilli, quien confirmó la autenticidad de los restos identificados por el equipo televisivo, explicó a Associates Press que pudieron verificar el hallazgo por la presencia de mosaicos térmicos cuadrados. Se cree que la pieza era del vientre del transbordador.

Los buzos que dieron con lo que resultó ser el nuevo fragmento de Challenger decidieron ponerse en contacto con la NASA dada la proximidad de la Costa Espacial de Florida, y la agencia revisó el video proporcionado.

Cuando Ciannilli vio el video, su "corazón dio un vuelco", trayéndolo de regreso al año del accidente. El administrador de la NASA, Bill Nelson, tuvo sentimientos parecidos: "Aunque han pasado casi 37 años desde que siete audaces y valientes exploradores perdieron la vida a bordo del Challenger, esta tragedia quedará grabada para siempre en la memoria colectiva de nuestro país. Para millones de personas de todo el mundo, yo incluido, el 28 de enero de 1986 sigue siendo como si fuera ayer".

Ahora la NASA sopesa su siguiente paso respecto al hallazgo, ya que todos los artefactos de los transbordadores espaciales son propiedad del Gobierno de Estados Unidos.

Las familias de los siete tripulantes fallecidos ya fueron notificadas. (Fuente/RT)