Imagen de archivo/RHC
Washington, 24 ene (RHC) Apenas inició el 2023 y Estados Unidos registra hasta este martes 39 tiroteos masivos, 1.56 casos al día, o como promedio un acto de violencia armada cada 24 horas, según la organización Gun Violence Archive.
Las estadísticas en tiempo real muestran además que las armas de fuego causaron en esta etapa mil 173 muertes; dos mil 63 heridos, en tanto, 55 niños de cero a 11 años y 329 adolescentes de 12 a 17 fueron baleados.
Medios locales citaron los datos tras producirse la víspera dos tiroteos relacionados en la comunidad costera de Half Moon Bay, California, que dejaron al menos siete fallecidos solo dos días después de que 11 personas perecieran en otro tiroteo masivo en Monterey Park, en el propio estado, el pasado 21 de enero.
Otro suceso que conmocionó también en California ocurrió el 16 de enero, cuando cuatro generaciones de una familia fueron ultimadas en una “ejecución similar a la de un cártel” en una vivienda.
En total seis personas perdieron la vida, entre ellas una madre de 16 años, su hijo de 10 meses, la abuela y la bisabuela del niño.
Más de un millón de muertes provocaron las armas de fuego en las últimas tres décadas aquí, de acuerdo con un estudio publicado en la revista médica JAMA Network Open.
Los investigadores determinaron que las tasas de mortalidad por esos artefactos aumentaron para la mayoría de los grupos demográficos en los últimos años, en especial durante la pandemia de la Covid-19.
Para el coautor del acercamiento al tema, Eric Fleegler, médico de urgencias pediátricas e investigador del Hospital Infantil de Boston y de la Facultad de Medicina de Harvard, la gran magnitud del problema lleva a Estados Unidos a estar ante un «nuevo momento en la historia de las muertes por armas de fuego».
Esta es la única nación del mundo donde existen más armas de fuego en poder de civiles que habitantes; los homicidios con armas de fuego son 25,2 veces más altos que en el resto de los países desarrollados y hay más tiroteos masivos que en cualquier otro lugar del planeta.
Como admitiera en su momento el presidente Joe Biden, la violencia armada es la epidemia que desangra al país y para no pocos observadores frenarla resulta muy difícil porque se interponen fuertes intereses políticos. (Fuente:PL)