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Quito, 10 jul (RHC) La Fiscalía General de Ecuador informó este lunes que investiga dos masacres que dejaron este fin de semana 10 muertos e igual cantidad de heridos en la ciudad costera de Guayaquil.

Las matanzas tuvieron lugar anoche en los barrios de Siete Lagos y La Florida en medio de la ola de inseguridad en el país y en particular en esa urbe, considerada una de las más violentas de América Latina.

En Siete Lagos hubo cuatro fallecidos y 10 heridos, incluidos tres menores de edad que participaban en una fiesta; mientras que el ataque en La Florida dejó seis muertos, señaló la Fiscalía.

En el crimen ocurrido en el primero de los barrios mencionados medios locales relatan que tres sujetos llegaron en un vehículo, entraron a la casa y abrieron fuego contra los ocupantes del inmueble donde presuntamente se vendía droga.

El otro suceso tuvo lugar en el marco de una celebración donde los asistentes disparaban al aire y encendieron fuegos artificiales, por lo cual el sonido de los disparos fue confundido con la pirotecnia.

En los seis primeros meses de 2023 se reportan mil 255 crímenes en la denominada Zona 8 de la provincia de Guayas, que incluye los municipios de Guayaquil, Durán y Samborondón, con lo cual casi siete personas mueren asesinadas cada día en esa área del país.

Ecuador vive una crisis de inseguridad que el Gobierno atribuye al auge del narcotráfico y a las disputas de bandas criminales por el control del tráfico de drogas.

El 2022 cerró con 25 muertes violentas por cada 100 mil habitantes, cifra más alta de la historia en el país.

Sin embargo, esos números podrían ser superados porque en el primer trimestre de 2023 hubo un incremento del 66 por ciento de los homicidios.

Ante la escalada del crimen, el Gobierno del presidente Guillermo Lasso adoptó medida como la autorización del porte de armas para civiles y el permiso para que policías y militares actúen con todos los medios a su disposición contra quienes consideren terroristas.

No obstante, expertos y la ciudadanía consideran necesaria una estrategia integral, con inversiones tanto para facilitar el trabajo de la fuerza pública como para atacar las causas de la problemática, con más empleo, salud y educación. (Fuente: Prensa Latina).