si no termina el narcotráfico, si no se logra la reconciliación de los colombianos, si no se hace el desarrollo desde los territorios, si no se logra la incorporación de los pueblos étnicos, si no se cambia el sistema de seguridad, si no se acaba con la corrupción y la impunidad «no hay paz posible».

Bogotá, 27 jul (RHC) El padre Francisco de Roux (en la foto) quien presidiera la Comisión de la Verdad destacó este jueves la esencia del Informe Final de esta instancia nacida al calor del Acuerdo de Paz de 2016.

Resaltó en especial que, al finalizar un conflicto, la principal parte del relato lo cuentan los ganadores, sin embargo, en el caso colombiano, es muy distinto pues son las víctimas quienes lo narran, tal como recoge el Informe presentado hace un año.

«Por eso las recomendaciones que salen de allí son un clamor de los colombianos, de exigencias éticas y políticas muy claras», expresó de Roux al programa matutino de la presidencia Colombia Hoy Radio.

De Roux considera que si no termina el narcotráfico, si no se logra la reconciliación de los colombianos, si no se hace el desarrollo desde los territorios, si no se logra la incorporación de los pueblos étnicos, si no se cambia el sistema de seguridad, si no se acaba con la corrupción y la impunidad «no hay paz posible».

El 28 de junio de 2022, la Comisión de la Verdad, instancia transitoria creada a partir de la firma del Acuerdo de Paz en 2016 entre el Estado y las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP), para esclarecer las causas, hechos y consecuencias de más de 50 años de conflicto armado en el país, presentó su Informe Final.

El documento es considerado una contribución histórica y uno de los mayores avances del Acuerdo de Paz en esta nación suramericana.

Durante su presentación, hace un año, de Roux manifestó que con lo expuesto en el documento llevan a la ciudadanía un mensaje de la verdad para detener la tragedia intolerable de un conflicto en el que el 80 por ciento de las víctimas son civiles no combatientes y menos del dos por ciento de las muertes ocurrieron en combate.

El Informe, dijo, es también una invitación a superar el olvido, el miedo y el odio a muerte que se ciernen sobre Colombia por causa del conflicto armado interno y es, además, una convocatoria a la paz grande.