Quito, 7 ene (RHC) El movimiento Alianza PAIS, fundado por el presidente de Ecuador, Rafael Correa, convocó a sus seguidores a la movilización permanente en defensa de las políticas públicas y las leyes aprobadas por el gobierno de la Revolución Ciudadana.
Durante una reunión de la Dirección Nacional de esa organización celebrada la víspera en Quito, se instó también a los militantes izquierdistas a defender la aprobación de los proyectos de ley sobre la herencia y la plusvalía, y a apoyar un segundo paquete de enmiendas constitucionales, las cuales serán discutidas en conferencias ideológicas previstas para el primer trimestre del presente año.
La Dirección Nacional de Alianza PAIS acordó, además, crear un Frente Político del Pueblo que será articulado a los movimientos sociales afines a la Revolución Ciudadana, mientras consolidará el Frente Unidos, integrado por más de 15 partidos y organizaciones políticas de izquierda.
Por su parte, la Asamblea Nacional de Ecuador aprobó una legislación que según sus defensores, define el uso y acceso a la tierra rural, el respeto a los territorios ancestrales, sin descuidar su función social y ambiental.
Conocida como Ley de Tierras Rurales y Territorios Ancestrales, el proyecto recibió el apoyo de 98 asambleístas, mientras que tres votaron en contra, y otros 23 se abstuvieron.
Con la votación realizada este jueves en el hemiciclo del Parlamento unicameral ecuatoriano se puso fin a un debate que necesitó de varias sesiones legislativas y de consultas prelegislativas y talleres con pobladores, organizaciones sociales, empresarios y comunidades de todo el país.
Hoy sembramos una semilla para la equidad en el campo, para acercarnos al Buen Vivir, al Ecuador que soñamos, aseguró la presidenta de la Asamblea Nacional, Gabriela Rivadeneira, en el debate previo a la aprobación.
Tras recordar que en América Latina la historia de injusticias están íntimamente ligadas a la falta de acceso a la tierra, la líder parlamentaria ecuatoriana apuntó que la nueva ley debe garantizar la soberanía alimentaria, y fundamentalmente, remarcó, el desarrollo de la unidad productiva familiar.
Cuidar la tierra es también cuidar los alimentos y la vida, recalcó Rivadeneira.
Además de crear mecanismos y estímulos para aprovechar la tierra que no se está trabajando adecuadamente, la ley propone la expropiación de predios rurales ocioso, prohíbe los latifundios y establece la creación de una Autoridad Agraria Nacional.
La nueva entidad se encargará de distribuir las parcelas productivas entre las familias campesinas y los pequeños y medianos productores, otorgar créditos accesibles, y brindar asistencia técnica y capacitación para la producción, infraestructura de riego y resolución de conflictos.
Otro de los artículos refiere que los inversionistas extranjeros podrán participar en asociación con empresas públicas nacionales o compañías de economía mixta, donde el Estado tenga la mayoría accionaria y la propiedad de tierra, y con la autorización de la Autoridad Agraria.
Defendida por la mayoritaria bancada de la gobernante Alianza PAIS, la ley, afirman, busca desarrollar las políticas y los instrumentos para alcanzar el objetivo estratégico de garantizar la soberanía alimentaria.
Además promocionar la agro-exportación y la transformación de la matriz productiva, a la vez que fortalece el desarrollo de organizaciones y redes de producción, comercialización y distribución de alimentos para promover la equidad entre espacios rurales y urbanos.
Por su parte, los opositores a la ley, entre los que destaca la directiva de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador, criticaron los mecanismos de redistribución de la tierra establecidos por la nueva normativa, y la creación de una Autoridad Agraria Nacional, la cual, aseguran, creará inseguridad jurídica, en tanto podría convertirse en un instrumento político.