Madrid, 23 ene (RHC) El presidente en funciones del Gobierno español, Mariano Rajoy, declinó temporalmente la oferta del rey Felipe sexto de someterse a la investidura, en un supuesto movimiento táctico para buscar apoyos.

Horas después que la formación emergente Podemos ofreciese al Partido Socialista Obrero Español y a Izquierda Unida negociar la constitución de un ejecutivo progresista, Rajoy optó la víspera por no ser, de momento, candidato a la investidura.

No estoy en condiciones de presentarme a la confianza del Parlamento, porque no reúno todavía una mayoría de votos a favor, y no tengo tampoco una mayoría absoluta acreditada de votos en contra, dijo Rajoy en una comparecencia pública.

Reconoció que la propuesta del secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, para formar un gobierno alternativo al del conservador Partido Popular, destrozó todo atisbo de estrategia que tuviera en mente.

Ganador en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre, pero sin la supremacía necesaria en el Congreso de los Diputados para garantizar su reelección, Rajoy lleva un mes sin encontrar la fórmula mágica que le permita a su agrupación perpetuarse en el poder.

Mientras el diputado de Izquierda Unida (IU) Alberto Garzón calificó de oportunidad única la propuesta de Podemos para constituir un gobierno en España con el PSOE, que evite la continuidad de la derecha en el poder.

Garzón emplazó a los líderes de Podemos, Pablo Iglesias, y del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, a iniciar de inmediato el diálogo a tres bandas para explorar todas las posibilidades de un ejecutivo alternativo al PP.

En rueda de prensa en el Congreso de los Diputados, el excandidato de IU a la presidencia del Gobierno aseguró que su formación hará todo lo posible para que el conservador Partido Popular (PP) abandone el Palacio de la Moncloa (sede ejecutiva).

Expresó su confianza en la sinceridad de los implicados, en alusión a Iglesias y Sánchez, quien también se mostró favorable a conversar sobre la iniciativa presentada este viernes por el secretario general de Podemos al rey Felipe VI.

Exhortó a todas las fuerzas a trabajar con honestidad sobre las propuestas para sacar a España de la situación de emergencia social en la que se encuentra.

A su juicio, con la aritmética parlamentaria es posible conformar esa coalición progresista porque lo que está en juego en estos momentos es la posibilidad de transformar las cosas.

Consideró que la sociedad no entendería que no se intentara esta alianza de cambio.

No obstante advirtió que cualquier acuerdo tendrá que ser apoyado por las bases de Izquierda Unida y lo fundamental ahora es hablar sólo de programas, no de nombres ni de ministerios.

Casi un millón de personas votaron por un nuevo país, un país ecológico y feminista al servicio de las clases populares y no les vamos a fallar, aclaró el parlamentario en referencia a los votos obtenidos por IU en las elecciones generales del pasado 20 de diciembre.

Garzón subrayó que el diálogo entre los diferentes actores políticos debe empezar pronto, antes, incluso, de que tenga lugar la sesión de investidura del jefe del Ejecutivo en funciones y del PP, Mariano Rajoy.