Quito, 29 ene (RHC) El presidente de Ecuador, Rafael Correa, defendió la conveniencia de un segundo paquete de enmiendas constitucionales para beneficio de las grandes mayorías de su país que las han solicitado.

Durante un conversatorio con medios de prensa, en la provincia de Santa Elena, insistió Correa en que el grupo de propuestas de reformas a la Carta Magna nace de una construcción social, pues surgen de solicitudes del pueblo y de sectores como los comuneros y los pueblos ancestrales.

Tras calificar de dinámico el proceso de construcción y socialización de las enmiendas, insistió el primer mandatario ecuatoriano en la importancia de analizar la realidad, detectar las faltas y corregirlas, para contribuir a la solución de problemas y perfeccionar lo que sea necesario por la vía democrática.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, reveló que en nueve años de gestión su Ejecutivo destinó casi 14 mil millones de dólares a la salud.

De acuerdo con el mandatario, en este período el gobierno de la Revolución Ciudadana, como denomina a su proyecto político, entregó 21 hospitales entre nuevos y totalmente repotenciados, y dijo que antes del fin de su mandato en 2017 la meta es llegar a 38, con los mayores estándares de calidad.

No se trata solo de inversión ni de cantidad sino de calidad, esa búsqueda de la excelencia, sobre todo en salud, insistió el jefe de Estado durante la inauguración de un hospital gineco-obstétrico en el sur de esta capital, donde en 64 años no se había construido ningún centro dedicado a esa especialidad.

Correa contó que hace más de medio siglo en Quito vivían unas 200 mil personas, pero en la actualidad el número de habitantes supera los dos millones.

También, ratificó que una decisión firme de su gobierno fue destinar los recursos del pueblo ecuatoriano al servicio de las grandes mayorías, sobre todo, de los más pobres para transformar el país que encontraron a su arribo a la presidencia en 2007, marcado por la exclusión y el olvido.

Pese a las dificultades económicas mundiales en 2015, que afectaron a casi todos los países del planeta, el presupuesto de salud en Ecuador ese año fue de 2 500 millones de dólares, según precisó el presidente, economista de profesión.

El fin último de la economía no es cuadrar cuentas, son los seres humanos, subrayó.

Al mismo tiempo, el mandatario criticó la manipulación de gran parte de la prensa dentro de su país que intenta hacer creer muchas veces que todo tiempo pasado fue mejor.

En la actualidad, su gobierno destina más de 90 millones de dólares para atender a pacientes necesitados de hemodiálisis, mientras la mayoría de la prensa califica el gesto de derroche, gasto y desperdicio.

Antes, sin embargo, esos muertos no eran noticia, reflexionó.

Otro de los objetivos al final de su mandato, según confesó Correa, será dejar unos 40 hospitales públicos acreditados por la Accreditation Canada International (ACI), la agencia acreditadora más exigente del mundo, argumentó.

Al decir del estadista, en el resto de América Latina de habla hispana nadie más cuenta con hospitales públicos acreditados por esa empresa y ya Ecuador tiene 36, cinco de ellos emplazados en esta capital.

El Presidente recalcó que la búsqueda de la excelencia en salud debe ser una prioridad.