Washington, 5 ene (RHC) Los aspirantes a la nominación demócrata para las elecciones presidenciales Hillary Clinton y el senador Bernie Sanders subieron el tono de sus ataques personales con el fin de demostrar quién es la mejor opción para llegar a la Casa Blanca.

Durante un debate en la Universidad de New Hampshire dejaron de andar por las ramas y se enfrascaron en un áspero intercambio que se inició cuando Sanders habló de los pagos recibidos por su rival del banco Goldman Sachs por conferencias privadas cuyo contenido permanece reservado, informa Prensa Latina.

La exsecretaria de Estado Clinton le pidió al senador que terminara su campaña para enlodar su nombre y que si tenía pruebas de sus afirmaciones, que las presentara, algo que Sanders eludió, pero afirmó que es el único aspirante demócrata que no recibe millonarias donaciones de Wall Street y los grandes bancos.

Durante el intercambio, el primero que los enfrenta solos en un escenario, tanto Clinton como Sanders enfocaron sus ataques en la viabilidad de algunas de sus propuestas si ganan la presidencia estadounidense.

En opinión del legislador, no se puede ser dos cosas a la vez, moderado y progresista, en referencia a Hillary, quien contraatacó y subrayó que ella es una moderada capaz de presentar resultados efectivos, en aparente referencia a planes de su rival que algunos críticos consideran irrealizables, y subrayó que ella no está haciendo promesas que no puede sostener.

Ambos demócratas también intercambiaron dardos sobre salud ya que mientras Sanders quiere un sistema de cuidados similar al de algunas naciones europeas, Clinton es partidaria de seguir mejorando el llamado Obamacare.

La puntera en las encuestas nacionales abordó el tema de la educación y su financiamiento, aspectos en los que no coincide con las posiciones de su rival.

 Sanders, quien mantiene una ventaja de cerca de 20 puntos en las encuestas en New Hampshire, se presentó como la mejor opción para los electores, mientras Hillary dijo que ella es la candidata más fuerte, a la vez que expresó que la pesquisa que ejecuta el FBI sobre el uso de un servidor privado para sus correos electrónicos no apartará nada que dañe su campaña.