Madrid, 10 mar (RHC) La agrupación emergente Podemos vaticinó el fracaso de la campaña dirigida a dividir a sus integrantes, que atribuyó a corporaciones financieras y a algunos dirigentes del PSOE, Partido Socialista Obrero Español.

En declaraciones a la prensa, Irene Montero, portavoz adjunta de Podemos en el Congreso de los Diputados de España, afirmó que dentro de su partido existen tantas posiciones como miembros o simpatizantes, pero rechazó que traten de convertir esas diferencias en fisuras, pues existe un compromiso férreo con la posibilidad de pactar un gobierno progresistas con el PSOE, Izquierda Unida y Compromís.

También, mediante una carta a la militancia de su partido, Íñigo Errejón, portavoz de Podemos en el Congreso, acusó a los socialistas españoles de dirigir una ofensiva contra su agrupación para neutralizar el viraje hacia la derecha.

En tanto, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, abogó por la conformación de un gobierno transversal que evite nuevas elecciones generales en España y saque de la presidencia al jefe de gobierno, Mariano Rajoy.

El líder del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, abogó por la conformación de un gobierno transversal que evite unas nuevas elecciones y permita poner fin a Mariano Rajoy.

En declaraciones en la ciudad gallega de La Coruña, Sánchez instó a su par de Podemos, Pablo Iglesias, a no desaprovechar la oportunidad de formar un ejecutivo con todas las fuerzas del cambio, como pidieron los españoles en las elecciones generales de diciembre.

Aseguró tener determinación, fuerza, ganas y ambición para lograr que Rajoy no siga un día más en el Palacio de la Moncloa, sede del poder central, como jefe del Gobierno en funciones.

El secretario general del PSOE, que hace una semana fracaso en su intento de investidura, reparó ante la prensa en la cuestión generacional que simbolizan tanto él como Iglesias y Albert Rivera, máximo dirigente de la agrupación de centroderecha Ciudadanos (C's).

Mucha gente joven quiere un gobierno de cambio y yo tiendo la mano al señor Iglesias para que hagamos posible ese anhelo, remarcó Sánchez, quien selló un controvertido pacto de investidura con C's impugnado por los partidos de izquierda.

Insistió en la conformación de una coalición con distintas formaciones políticas, tanto de la centroderecha como de la izquierda, en la que la única línea roja sea, precisó, poner fin a la administración del conservador Partido Popular (PP).

En respuesta a Podemos, que acusó al PSOE de estar detrás de una campaña para fracturar a esa fuerza emergente, indicó que los socialistas son respetuosos con los debates internos de otros partidos y no va a entrar en descalificaciones ni insultos.

Tampoco nos centraremos en aquellas cuestiones que nos separan, sino en intentar un gobierno que exprese de verdad el resultado de las urnas del 20 de diciembre, señaló.

El portavoz de Podemos en el Congreso de los Diputados, Íñigo Errejón, acusó al PSOE de dirigir una ofensiva contra la agrupación para neutralizar su viraje hacia la derecha.

En una carta a la militancia, Errejón interpretó así la repercusión mediática que generó la víspera la dimisión de nueve dirigentes de Podemos en la Comunidad de Madrid.

"Todo el aparato del PSOE y alrededores está necesitado de algo con lo que tapar su reciente giro hacia el PP arrastrado por Rivera", denunció el vocero parlamentario.