Brasilia, 17 mar (RHC) La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, afirmó contar con fuerzas suficientes para enfrentar las celadas que desde su reelección en el 2014 le tienden quienes intentan paralizar el gobierno y buscan arrebatarle su mandato de forma golpista.

Subrayó Dilma Rousseff que extenderán las manos a todos cuantos quieran lo mejor para Brasil y estén dispuestos al diálogo y la concertación, antes de enfatizar que la gritería de los golpistas no va a apartarlos de su rumbo.

La primera mandataria también pronunció un discurso en el Palacio de Planalto durante la ceremonia de toma de posesión de nuevos ministros, entre ellos el ex jefe de Estado Luiz Inácio Lula da Silva, a quien definió como un gran líder político, compañero de lucha y de conquistas y un gran amigo.

La presidenta de Brasil dijo, además, que las actuales circunstancias le dan la oportunidad de traer al gobierno al mayor líder político de ese país, y enfatizó que el hecho de aceptar la jefatura de la Casa Civil demuestra la grandeza y humildad de Lula y desmiente a quienes desde hace cinco años especulan y apuestan por una separación entre ellos.