Quito, 28 abr (RHC) Las autoridades ecuatorianas prosiguen con la organización de albergues y la distribución de ayuda humanitaria para atender a los damnificados del terremoto que devastó la costa noroccidental del país el pasado día 16.
Los reportes oficiales sobre las consecuencias de este movimiento telúrico dan cuenta, hasta ahora, de 659 fallecidos, más de cuatro mil heridos, 41 desaparecidos y 29 mil 67 albergados producto de la destrucción de seis mil 998 construcciones y afectaciones a otras dos mil 740.
Debido a la tragedia, el gobierno habilitó 39 albergues permanentes y 64 tQuito, 28 abr (RHC) Las autoridades ecuatorianas prosiguen con la organización de albergues y la distribución de ayuda humanitaria para atender a los damnificados del terremoto que devastó la costa noroccidental del país el pasado día 16.emporales para acoger a las seis mil 804 familias necesitadas, según un reporte de la Secretaría de Comunicación (Secom) del Estado, reporta Prensa Latina.
La Secretaría Técnica para la Gestión Inclusiva en Discapacidades ha identificado a 268 personas con discapacidad en albergues y 126 hospedados por familias acogientes.
En lo referente a seguridad, permanecen movilizados 14 mil 372 efectivos de las Fuerzas Armadas y ocho mil 827 policías, que fueron ubicados en las zonas afectadas con el propósito de garantizar la seguridad de los ciudadanos y restringir el paso a la llamada zona cero.
Los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Perú, Ollanta Humala, viajaron con asistencia humanitaria a la costera provincia de Manabí, la más dañada por el movimiento telúrico, y caminaron por algunos barrios junto a su homólogo ecuatoriano, Rafael Correa.
Para Correa, recorrer los territorios fuertemente impactados por el terremoto se ha vuelto una tarea cotidiana a fin de intercambiar con la población y las autoridades locales que evalúan los daños.
El Ejecutivo ecuatoriano expuso la víspera un Plan de Reactivación Productiva y Económica para ayudar a las zonas del país más críticas, localizadas en las provincias costeras de Manabí y Esmeraldas.
La iniciativa contempla la apertura de líneas de crédito, flexibilización de compromisos financieros, facilidades ante entidades recaudadoras, exoneraciones tributarias y la contratación de mano de obra local para reconstrucción.
Además, las acciones propuestas incluyen oferta de bonos y tasas de crédito preferenciales para la construcción de viviendas.