Brasilia, 14 jun (RHC) La Cámara de Diputados de Brasil aprobó por mayoría de votos la casación del mandato de su exlíder Eduardo Cunha por mentir a la Comisión Parlamentaria de Investigación sobre el caso de la estatal Petrobras, ocultándole que tenía cuentas en bancos suizos.
Once de los 21 integrantes del colegiado respaldaron el parecer del relator Marcos Rogerio, favorable a la separación definitiva de Cunha de sus funciones, Nueve votaron en contra.
Según Rogerio, el protagonizado por el expresidente de la Cámara y uno de los principales referentes del ahora gobernante Partido del Movimiento Democrático Brasileña (PMDB) constituye el mayor escándalo juzgado en esa Casa, pues no se trata solo de mentir, sino también de cometer un fraude fiscal.
La decisión del Consejo debe ser refrendada ahora por el pleno de la Cámara Baja, para lo cual serán necesarios los votos a favor de 257 de los 513 legisladores.
Antes, Cunha tendrá cinco días para presentar su defensa y demostrar, como alega, que no es propietario de esas cuentas secretas, presuntamente engrosadas con dineros provenientes del esquema de corrupción de Petrobras.
Hoy, además, un juez civil de Paraná aceptó un pedido del Ministerio Público Federal y decretó la indisponibilidad de recursos financieros y bienes del diputado peemedebista por improbidad administrativa, dijo el diario digital Brasil 247.
La votación sobre la casación del mandato en el Consejo de Ética debió realizarse la semana pasada, pero fue pospuesta en dos oportunidades a solicitud de Rogerio, que pidió más tiempo para evaluar una propuesta del legislador Joao Carlos Barcelar de, en vez de poner fin al encargo de Cunha, suspenderlo por solo tres meses.
La denuncia contra el exlíder parlamentario fue presentada en octubre de 2015 por legisladores de los partidos Socialismo y Libertad y Red Sustentabilidad.
Sin embargo, debido a las innumerables maniobras dilatorias hechas por éste y sus aliados el proceso que comenzó hace casi ocho meses no concluyó hasta hoy en esa instancia.
En ese lapso se produjeron 14 alteraciones en la composición del colegiado buscando beneficiarlo; fue destituido el primer relator, Fausto Pinato; y el presidente interino de esa Casa y fiel aliado de Cunha, Waldir Maranhao, restringió el análisis del Consejo solo al hecho que este mintió al ocultar sus cuentas bancarias en Suiza.
Mientras se divulgó el índice de desaprobación del gobierno provisional de Brasil que encabeza el presidente Michel Temer alcanza el 67 por ciento, según los resultados de una encuesta del Instituto Vox Pupuli revelados hoy aquí.
Realizado por encargo de la Central Única de los Trabajadores entre el 7 y el 9 de junio, en 116 ciudades y con un universo de dos mil entrevistados, el sondeo mostró además que un 32 por ciento consideró a Temer peor de lo que imaginaron.
Al evaluar el primer mes de gestión del mandatario interino, un 34 por ciento lo catalogó de negativo, un 33 por ciento lo evaluó de regular y apenas 11 por ciento opinó que fue positivo.
El Nordeste es la región del país donde resulta peor la calificación del Ejecutivo, pues 49 por ciento lo consideró negativo, 41 regular y solo 10 lo valoró positivamente. En el Sudeste las evaluaciones son de 45, 42 y 13 puntos porcentuales, respectivamente.
Para la mayoría de los encuestados, las perspectivas con el actual mandato provisional resultan también poco alentadoras: el 52 por ciento cree que aumentará el desempleo, el 55 dice que serán afectados los derechos de los trabajadores y el 56 estima que los programas sociales se verán resentidos y empeorarán.
Por otra parte, el 69 por ciento de los encuestados respondió que no creía que la separación de su cargo de Dilma Rousseff fuera la solución para los problemas de Brasil, mientras un 67 por ciento estuvo de acuerdo en la realización de una nueva elección presidencial este mismo año.